WASHINGTON 15 Dic. (Reuters/EP) -
El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, ha acusado este jueves al presidente sirio, Bashar al Assad, de perpetrar una "masacre" en Alepo por la ofensiva gubernamental sobre la zona este, en manos de los rebeldes.
"Es poco menos que una masacre", ha dicho el jefe de la diplomacia estadounidense, que abandonará el cargo el próximo 20 de enero, en una rueda de prensa celebrada en la sede del Departamento de Estado, en Washington.
Kerry ha insistido en la necesidad de lograr un alto el fuego inmediato, duradero y verificable para esta importante ciudad siria, al tiempo que ha instado a la comunidad internacional a presionar a las partes para conseguirlo.
El Gobierno y los rebeldes sirios llegaron el miércoles a un acuerdo, auspiciado por Rusia y Turquía --aliados internacionales de Damasco y la oposición, respectivamente--, para sacar a los últimos civiles y combatientes de Alepo oriental.
El acuerdo llegó después de una primera tentativa el martes, cuando el régimen de Al Assad anunció que, tras meses de una intensa ofensiva, había logrado tomar todos los barrios de Alepo este, salvo un pequeño reducto opositor de dos kilómetros cuadrados.
El pacto ha prosperado porque los rebeldes han aceptado evacuar también las localidades de Foua y Kefraya, en Idleb, dos bastiones del Gobierno que llevan meses sitiados y donde la situación humanitaria es igualmente crítica.
Naciones Unidas ha advertido de que el sufrimiento al que se ha sometido a la población civil de Alepo podría constituir un crimen de guerra y se ha mostrado segura de que, pese a la actual parálisis del Consejo de Seguridad, sus responsables deberán rendir cuentas algún día.
"Ha habido muchas advertencias sobre la situación en Alepo", ha dicho esta semana el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, al Consejo de Seguridad. "Hemos fracasado colectivamente al pueblo sirio. La historia no nos absolverá fácilmente", ha sentenciado.