Archivo - El secretario del Consejo Nacional de Defensa y Seguridad de Ucrania, Oleksii Danilov - Europa Press/Contacto/Ruslan Kaniuka - Archivo
MADRID, 27 Jun. (EUROPA PRESS) -
El secretario del Consejo Nacional de Seguridad y Defensa de Ucrania, Oleksii Danilov, ha especulado este martes con que la reciente rebelión del Grupo Wagner y su líder, Yevgeni Prigozhin, haya podido ser instigada por altos cargos militares de Rusia.
"Prigozhin no es una figura independiente, detrás de él hay personas en uniforme, y esto se da por supuesto, no era su propio deseo ir a algún lado (...) está claramente bajo control", ha manifestado Danilov.
En este sentido, el alto funcionario ucraniano ha apuntado que, si bien antes Prigozhin obedecía a las órdenes del presidente de Rusia, Vladimir Putin, a día de hoy el mandatario "ha perdido ese control", que ahora recae en un grupo "cuyo propósito es reemplazar el liderazgo de Rusia".
Asimismo, Danilov ha aventurado que en el futuro se producirán nuevos episodios como el vivido el fin de semana, y ha criticado que el Kremlin anunciara en la víspera una declaración de Putin que, supuestamente, iba a cambiar "el futuro de Rusia", pero que finalmente no fue así.
Danilov ha descartado la posibilidad de que la revuelta de los mercenarios haya sido "un espectáculo", y ha asegurado que se trató de "una verdadera operación militar" que ha puesto de manifiesto que el presidente Putin "no es el jefe del país".
"Todos huyeron de Moscú como ratas, huyeron urgentemente tan pronto como comenzaron algunos eventos incomprensibles, en los que no pudieron influir, y esto tendrá enormes consecuencias para Rusia", que ahora se ha destapado como un país "no tan controlado" como podía parecer, ha aseverado el funcionario ucraniano.
La rebelión del Grupo Wagner, liderada por Prigozhin, comenzó a última hora del viernes con la toma de la ciudad rusa de Rostov, sede del mando sur del Ejército, con la intención de dirigirse hacia Moscú para pedir explicaciones al Ministerio de Defensa por matar presuntamente a sus hombres en un bombardeo.
En pleno pulso con el Kremlin y a pocos cientos de kilómetros de Moscú, el convoy dio media vuelta en la tarde del sábado gracias a la mediación del presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, en un acuerdo para parar la revuelta, amnistiar a los mercenarios y mandar al exilio a Bielorrusia a Prigozhin.