Los servicios de seguridad de Suecia descartan elevar la alerta antiterrorista, que ya aumentó hace dos meses
MADRID, 17 (EUROPA PRESS)
El primer ministro de Suecia, Ulf Kristersson, ha asegurado que el terrorista que atentó el lunes por la noche en Bruselas tenía como objetivo a ciudadanos suecos, ya que las tres víctimas --dos de las cuales han perdido la vida-- tenían esta nacionalidad, y los indicios no invitan a pensar a un tiroteo al azar.
El sospechoso, Abdesalem L., de 45 años y origen tunecino, disparó con un fusil contra tres personas, menos de dos horas antes de que comenzase el partido de clasificación para la Eurocopa de 2024 entre Bélgica y Suecia en el estado Rey Balduino.
"Todo indica que se trata de un acto terrorista dirigido contra Suecia y los ciudadanos suecos", ha afirmado este martes en rueda de prensa Kristersson, después de que el presunto tirador fuese abatido a tiros por la Policía belga tras permanecer huido durante toda la noche.
El primer ministro ha confirmado que las tres víctimas tienen nacionalidad sueca y que el sospechoso había visitado en alguna ocasión el país nórdico, aunque no estaba fichado por las autoridades. Sí había pedido asilo en Bélgica, aunque fue denegado, y Kristersson ha aprovechado para abogar por la rápida expulsión de extranjeros en situación irregular. "Suecia y la UE necesitan un mejor control de las fronteras", ha apuntado.
Kristersson también ha hablado en las últimas horas con su homólogo belga, Alexander De Croo, que en redes sociales ha recalcado como "prioridad" ayudar a las familias de las víctimas y ha llamado a trabajar para que todos los aficionados que acudieron el lunes al partido "puedan volver a casa a salvo".
EL NIVEL DE AMENAZA SE MANTIENE
"Suecia y los intereses suecos (en el extranjero) nunca han estado ante una amenaza tan grande como ahora", ha advertido en su comparecencia ante los medios, en la que ha hablado de "tiempos oscuros" en cuestiones de seguridad.
Los servicios de seguridad suecos (SAPO) ya habían elevado a mediados de agosto el nivel antiterrorista, hasta el segundo más alto, pero no ven motivos para aumentarlo aún más, como ha aclarado en un comunicado su principal responsable, Charlotte von Essen, que sí ha reconocido el peligro del extremismo islamista.
El Ministerio de Exteriores ha recomendado a los ciudadanos suecos en el extranjero que extremen la vigilancia, ante el aumento de las amenazas. Les ha instado asimismo a inscribirse formalmente en el registro del Gobierno y a tener en cuenta los consejos que puedan dar las autoridades de los distintos países.