MADRID 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, ha asegurado este miércoles que el vicepresidente primero del país, Martín Vizcarra, no formará parte de un Gobierno "que nazca de una maniobra injusta y antidemocrática".
El mandatario ha indicado que se presentará este jueves ante el Parlamento, donde se someterá a una moción de censura, con tranquilidad, firmeza de espíritu y fe en las instituciones democráticas, según ha recogido el diario local 'El Comercio'.
Las declaraciones del dirigente peruano han tenido lugar en el marco de la creciente crisis política que está viviendo el país desde que se hizo pública la presunta vinculación de Kuczynski con la constructora brasileña Odebrecht.
El vicepresidente primero, que sería la persona que sustituiría de manera interina al presidente en caso de que avance la moción, llegó el miércoles a Lima para asistir al debate en el que el Congreso decidirá si procede a destituir al mandatario por sus implicaciones en el conocido como 'caso Odebrecht'.
Por su parte, el jefe de Estado peruano ha confirmado que se presentará ante el pleno con Vizcarra y la vicepresidenta segunda, Mercedes Aráoz. Asimismo, también contará con la presencia de su abogado, Alberto Borea.
El cerco sobre Kuczynski se ha estrechado después de que la filial de Odebrecht en Perú entregase al Congreso un informe demoledor para la continuidad política del presidente, que hasta ahora había esquivado la trama de corrupción que tejió la constructora brasileña por varios países de América Latina.
Según dicho documento, Odebrecht habría pagado un total de 752.000 dólares (635.000 euros) entre 2004 y 2006 a la empresa Westfield Capital, que figura en la declaración de intereses presentada por Kuczynski en enero de 2017. Los pagos se habrían realizado cuando el presidente se encontraba al frente de la cartera de Economía.
Aunque ha reconocido no ser buen comunicador, Kuczynski ha asegurado que es una persona transparente que jamás ha incurrido en actos de corrupción. Según el dirigente, los contratos firmados entre Odebrecht y su empresa, estaban a cargo de su socio Gerardo Sepúlveda.
"Pido disculpas, primero, por no haber sido lo suficientemente cuidadoso y prolijo en el orden y registro de todas mis actividades. No he sido suficientemente ordenado con mis archivos y memorias. Lo reconozco y lo lamento profundamente. Ser descuidado es un defecto pero no es, y no ha sido ni será jamás, una herramienta de deshonestidad y mucho menos de delito", ha afirmado.
En relación con Westfield Capital aseveró que nunca fue creada con el fin de blanquear dinero y destacó que fue creada en 1992 y no se encuentra en ningún paraíso fiscal sino en Estados Unidos, cumpliendo con todas las exigencias tributarias.