LIMA, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente dimitido de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, ha regresado este jueves al Palacio de Gobierno para despedirse de los trabajadores, un día después de que renunciara al cargo por su presunta implicación en el escándalo de corrupción de Odebrecht.
Kuczynski abandonó el Palacio de Gobierno sobre las 14.30 (hora local) del miércoles rumbo a su residencia privada después de grabar un mensaje a la nación en el que anunciaba que había decidido dejar el cargo para zanjar la crisis política que arrastra el país.
Desde entonces había permanecido recluido en su casa particular pero en torno al mediodía ha regresado a la sede del Ejecutivo para despedirse personalmente de sus trabajadores. La primera ministra, Mercedes Aráoz, le ha acompañado en este trámite, según recoge RPP.
Kuczynski dimitió justo un día antes de que el Congreso votara una moción de censura en su contra por su presunta implicación en la trama de pago de sobornos a cambio de favores políticos que protagoniza la constructora brasileña en toda la región.
El presidente sobrevivió a una moción de censura en diciembre --la oposición denuncia que gracias a un acuerdo secreto con Fuerza Popular que le permitió conseguir votos a cambio de indultar al exmandatario Alberto Fujimori--. Sin embargo, esta vez, de acuerdo con la prensa local, todo indicaba que no lo conseguiría.
Los acontecimientos se precipitaron el martes, cuando Fuerza Popular difundió unos vídeos en los que supuestos emisarios del Gobierno ofrecen dinero y obras públicas en sus regiones a diputados de este partido opositor para que votaran en contra de la segunda moción de censura.
El Congreso votará el viernes la renuncia de Kuczynski, tras lo cual el vicepresidente, Martín Vizcarra, tomará posesión del cargo. Según la Constitución, debe agotar el mandato presidencial, que expira en 2021, pero también puede convocar elecciones anticipadas.
Fuerza Popular, la mayor fuerza del Congreso, ha avanzado este jueves que está dispuesta a dejar gobernar a Vizcarra si apuesta por una "fórmula mixta" para su Ejecutivo. En cambio, la líder izquierdista Verónika Mendoza, que quedó tercera en los comicios de 2016, por detrás de Kuczynski y Keiko Fujimori, ha pedido nuevas elecciones.