Archivo - El primer ministro interino de Líbano, Nayib Mikati, durante una rueda de prensa en Beirut (archivo) - -/Dalati & Nohra/Dpa - Archivo
Mikati asegura que Hezbolá apoya la aplicación de la resolución 1701 y dice que "la solución diplomática está sobre la mesa"
MADRID, 11 Oct. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro en funciones de Líbano, Nayib Mikati, ha reclamado este viernes a Naciones Unidas que apruebe una resolución reclamando "un alto el fuego inmediato" con Israel y la aplicación de la resolución 1701, aprobada en 2006, al tiempo que ha recalcado que el partido-milicia chií Hezbolá "apoya" que la misma sea materializada en su totalidad.
Mikati ha recalcado tras una reunión del Consejo de Ministros que "Hezbolá, como parte del Gobierno, apoya la aplicación de la resolución", antes de destacar que el alto el fuego es "esencial", según ha informado la agencia estatal libanesa de noticias, NNA. "La solución diplomática está sobre la mesa", ha argumentado.
"Estamos comprometidos con nuestros derechos y nuestro territorio y hemos mostrado en repetidas ocasiones en otros internacionales el compromiso de Líbano con la resolución 1701", ha sostenido, antes de subrayar que la invasión del país es "totalmente inaceptable".
Israel ha denunciado en numerosas ocasiones que Hezbolá incumple la citada resolución, aprobada de cara al alto el fuego de 2006, al mantener posiciones al sur del río Litani, situado a unos 30 kilómetros de la frontera, y negarse a su desarme, mientras que Beirut ha acusado igualmente a Israel de violar la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU.
Así, el primer ministro libanés ha dicho que "Líbano es víctima de la arrogancia israelí, que no es disuadida y que viola la soberanía libanesa ante los ojos de todo el mundo, impulsada por el sospechoso silencio en torno a sus masacres" en la Franja de Gaza y en territorio libanés.
Mikati ha condenado los ataques de Israel contra la Fuerza Interina de Naciones Unidas para Líbano (FINUL), que dejan cuatro 'cascos azules' heridos en los últimos dos días. "Es un crimen condenable por nuestra parte y por la comunidad internacional, cuya santidad está siendo violada", ha argumentado.
Israel describe su invasión, desatada el 1 de octubre, como una operación "selectiva y limitada" contra "objetivos terroristas e infraestructuras" de Hezbolá. La ofensiva fue lanzada tras cerca de dos semanas de ataques intensificados y ha ido en paralelo con un recrudecimiento de los bombardeos contra la capital, Beirut, y otras zonas del país.
Las autoridades libanesas han denunciado más de 2.000 muertos a causa de los ataques israelíes desde el estallido de los enfrentamientos, el 8 de octubre de 2023, mientras que miles de personas han resultado heridas y cerca de 1,2 millones se han visto forzadas a huir de sus hogares.
El repunte de las hostilidades se enmarca en los enfrentamientos desde hace ya más de un año, después de que Hezbolá atacara territorio israelí un día después de los ataques perpetrados el 7 de octubre de 2023 por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) y otras facciones palestinas, que llevaron a Israel a desatar una cruenta ofensiva contra la Franja de Gaza.