MANILA 17 Sep. (Reuters/EP) -
Un ciudadano noruego, Kjartan Sekkingstad, ha sido liberado este sábado por el grupo islamista Abú Sayyaf, afín a Al Qaeda, tras un año secuestrado, han confirmado las autoridades filipinas.
Sekkingstad fue secuestrado en un complejo vacacional de lujo de la isla de Samal, en la provincia de Davao del Norte junto a una mujer filipina --ya liberada-- y dos canadienses que fueron ejecutados por los raptores. No se ha confirmado el posible pago de rescate, pero Abú Sayyaf no suele liberar a sus secuestrados sin cobrar.
El noruego ha sido liberado en Patikul, una localidad del archipiélago de Sulu y está ya bajo custodia de Nur Misuari, fundador del Frente Moro de Liberación Islámica (MILF, por sus siglas en inglés), en la ciudad de Jolo, ha informado un negociador de la Presidencia, Jesús Dureza.
Sekkingstad iba a ser recibido este mismo sábado por el presidente filipino, Rodrigo Duterte, pero el encuentro finalmente fue suspendido debido al mal tiempo.
"Sus primeras palabras cuando pude hablar con él por teléfono fueron: gracias, presidente Duterte", ha indicado Dureza. "Su liberación ha llevado meses de esfuerzos silenciosos y pacientes pero decididos", ha añadido.
Un portavoz militar, el comandante Filemón Tan, ha asegurado que la liberación del noruego ha sido el resultado de operaciones militares "intensas" contra Abú Sayyaf. También ha mencionado la intervención del MILF.
Desde Oslo, el Gobierno noruego ha expresado su satisfacción por la liberación, pero ha querido ser cauto porque, ha subrayado, Sekkingstad aún no está bajo custodia de las autoridades. "Seguimos trabajando en esto y no vamos a relajarnos hasta que Sekkingstad esté sano y salvo con las autoridades filipinas", lo que probablemente "ocurrirá mañana", ha apuntado el ministro de Asuntos Exteriores, Boerge Brende.
El grupo es especialmente conocido por sus secuestros de extranjeros a cambio de rescates, a algunos de los cuales ha ejecutado. Dos canadienses fueron ejecutados este año por Abú Sayyaf, mientras que la semana pasada dos indonesios consiguieron escapar, si bien se especula con que fueron liberados después de que su familia pagara el rescate.