MADRID, 5 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Misión Independiente de Investigación de la ONU sobre Libia ha informado este lunes del hallazgo de nuevas fosas comunes en Tarhuna, Libia, y ha adelantado algunos de los puntos del informe que en los próximos días presentará al Consejo de Derechos Humanos de la ONU, para dar cuenta de los continuos abusos cometidos en ese país.
El presidente de la misión en Libia, Mohamed Auajar, ha indicado en un comunicado que las pesquisas han permitido identificar "fosas comunes no descubiertas anteriormente en esa ciudad", ubicada unos 65 kilómetros al sureste de la capital, Trípoli, mediante el uso de tecnología avanzada.
"No sabemos cuántos cuerpos puede haber, ahora hay que excavar. Pero hay cientos de personas cuyo paradero se desconoce", ha subrayado Auajar.
En este sentido, ha precisado que más de 200 personas siguen desaparecidas en Tarhuna y sus alrededores, causando "una angustia incalculable a sus familias, que tienen derecho a saber la verdad sobre el destino de sus seres queridos".
Auajar ha denunciado en una rueda de prensa la persistencia de una cultura de impunidad en el país norafricano, afirmando que esa falta de rendición de cuentas supone "un obstáculo enorme" para la reconciliación nacional, la verdad y la justicia para las víctimas y sus familias.
En el apartado referente a Tarhuna, el informe de la ONU recopila testimonios y encuentra evidencia de "la perpetración generalizada y sistemática de desapariciones forzadas, exterminio, asesinato, tortura y encarcelamiento" y subraya que todas estas acciones constituyen crímenes de lesa humanidad cometidos por la milicia Al Kani.
El informe que se presentará al Consejo de Derechos Humanos de la ONU esta semana detalla cómo los combatientes de la milicia Al Kani ejecutaron y encarcelaron a cientos de personas entre 2016 y 2020.
Respecto a la desaparición de mujeres, Aujjar ha afirmado que "la discriminación y la violencia son una característica de la vida cotidiana de la mayoría de las mujeres y niñas en Libia".
"A la misión le preocupa especialmente que la ley interna no brinde protección contra la violencia sexual y de género ya que esta carencia contribuye a la impunidad de tales delitos", ha lamentado Aujar.
El país se encuentra dividido nuevamente después de que la Cámara de Representantes de Tobruk diera por finalizado el mandato del primer ministro de unidad, Abdul Hamid Dbeibé, por el aplazamiento de las presidenciales de diciembre y nombrara para el cargo a Fazi Bashaga.
El Gobierno de unidad ha rechazado la decisión de la Cámara de Representantes, que supone un varapalo para los esfuerzos para poner fin al conflicto, y ha mantenido que Dbeibé seguirá en el cargo, una postura apoyada por la comunidad internacional.
Dbeibé fue elegido como primer ministro por el Foro de Diálogo Político Libio (LPDF) en febrero de 2021, con lo que sustituyó al hasta entonces primer ministro de unidad, Fayez Serraj, quien aceptó ceder sus competencias tras el proceso de consultas, iniciado después de un acuerdo de alto el fuego después de que las autoridades de Trípoli rechazaran la ofensiva militar lanzada en abril de 2019 por el general Jalifa Haftar, alineado con las autoridades asentadas en el este.