MADRID, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
El líder del partido-milicia chií libanés Hezbolá, Hasán Nasralá, ha acusado este domingo a Estados Unidos de respaldar al grupo yihadista Estado Islámico en el este de Siria, escenario de una ofensiva del Ejército sirio y las milicias que lo respaldan.
En sus declaraciones, Nasralá ha dicho que "Estados Unidos está intentando evitar y aplazar la batalla contra Estado Islámico", recalcando que las operaciones en la región de Badia, Deir Ezzor, Mayadín y Al Bukamal "eran inevitables y lo seguirán siendo, ya que Estado Islámico sólo terminará una vez sea completamente erradicado".
"Estados Unidos sólo ayuda cuando sus aliados son los que pueden hacerse con el control de las zonas liberadas", ha manifestado, en referencia a las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) --una coalición de milicias kurdo-árabes lideradas por las Unidades de Protección Popular (YPG)--.
En este sentido, ha recordado la ofensiva del Ejército libanés y Hezbolá en la frontera común, asegurando que "Estados Unidos no quería el fin de la presencia de Estado Islámico en la frontera libanesa".
"Presionaron al Estado y el Ejército libanés, suspendiendo temporalmente la asistencia militar", ha indicado, tal y como ha recogido el portal local de noticias An Nahar.
Nasralá ha destacado que "Estado Islámico ha sido expulsado de muchas ciudades y localidades (de Siria)", añadiendo que "si alguien cree que la batalla debe detenerse antes de llegar a la frontera con Irak, le digo que Estado Islámico atacaría de nuevo e iniciaría nuevas guerras y batallas, ya que es su único proyecto".
"Estado Islámico ha intentado recuperar la iniciativa recientemente, y de no haber sido por los enfrentamientos heroicos del Ejército sirio y los combatientes de la resistencia --en referencia a Hezbolá--, la batalla podría haber seguido otro curso", ha recalcado.
Así, ha reiterado que el grupo yihadista está preparando planes "para regresar a todas las zonas que ha perdido en Siria" e incluso a la localidad libanesa de Arsal, ubicada en la frontera común.
Por otra parte, Nasralá ha reiterado que el presidente del país, Michel Aoun, "no es un agente de Hezbolá", añadiendo que "lo que molesta a Estados Unidos es que quiere un presidente que sea su agente".
"Aoun representa a una mayoría popular en Líbano y es una verdadera garantía nacional, y lo que digan los estadounidenses no cambiará nada", ha recalcado el líder de Hezbolá.
Nasralá ha reconocido además que las nuevas sanciones que Washington planea aplicar sobre el grupo "afectarán a la economía libanesa", apuntando que "no cambiarán ni la postura de Hezbolá".
"Queremos seguridad, paz y estbailidad. Queremos que las elecciones se celebren a tiempo, que continúe el diálogo y que el Gobierno haga su trabajo", ha manifestado.
Por último, ha criticado nuevamente el papel de Arabia Saudí en la región, reclamando a Riad que deje de apoyar "a grupos wahabíes", en referencia a Estado Islámico y otros grupos yihadistas.
"La paz y seguridad regional podrá lograrse cuando Arabia Saudí deje de apoyar a grupos wahabíes. Arabia Saudí impide la seguridad y la paz en Yemen, Bahréin, Irak y Pakistán", ha remachado.