MADRID, 22 Dic. (EUROPA PRESS) -
El líder de la autoproclamada República de Nagorno Karabaj, Samvel Shahramanián, ha anulado este viernes la disolución de la región, prevista para el próximo 1 de enero de 2024, por considerar que no existen documentos legítimos que, en el marco de la legislación de Nagorno Karabaj,prevean dicha medida.
"En el marco de la legislación de Artsaj (nombre con el que las autoridades se refieren a la región) no existe documento alguno que contemple la disolución de las instituciones gubernamentales de la misma", ha concretado en relación con el anuncio realizado el pasado mes de septiembre y con el que se ponía fin a más de tres décadas de control sobre el territorio, según informaciones del portal de noticias Armtimes.com.
La Presidencia de Artsaj informó entonces de "la disolución de todas las instituciones estatales y sus organizaciones subordinadas a partir del 1 de enero de 2024", cuando consideraba que la República de Nagorno Karabaj "dejaría de existir".
Asimismo, resaltaba que la decisión "tiene en cuenta el acuerdo alcanzado con Azerbaiyán, mediado por las tropas de pacificación rusas, para el paso libre, voluntario y sin restricciones de los residentes de Nagorno Karabaj, incluido el personal militar que ha entregado las armas".
Ahora, sin embargo, Shahramanián ha reculado y ha manifestado que dicho documento "no es válido" y que "ningún documento puede ir en contra de lo que se estableció siguiendo la voluntad del pueblo". Estas palabras, pronunciadas durante un discurso desde Ereván, la capital de Armenia, se topan con los avances registrados recientemente entre Armenia y Azerbaiyán a la hora de lograr un acuerdo de paz definitivo que fije el reconocimiento mutuo de su integridad territorial.
Nagorno Karabaj es un territorio de unos 4.400 kilómetros cuadrados en el Cáucaso Sur recuperado por Azerbaiyán en una ofensiva militar de apenas 24 horas iniciada el pasado 19 de septiembre. Hasta entonces la zona, de mayoría armenia, había estado más de tres décadas bajo control de fuerzas proarmenias pese a que la comunidad internacional reconocía la región como de soberanía azerí.
El alto el fuego anunciado el 20 de septiembre tras la ofensiva, que dejó más de 200 muertos en Nagorno Karabaj y se saldó con la muerte de más de 190 militares azeríes, incluye el desarme de grupos armados, la retirada de militares armenios --si bien Ereván niega que estén desplegados en la zona-- y la "reintegración" del territorio en Azerbaiyán, para la cual se han celebrado hasta ahora dos reuniones entre delegaciones de Azerbaiyán y de representantes armenios de la región.