ISLAMABAD 29 Sep. (Reuters/EP) -
El líder del separatista Frente de Liberación de Baluchistán (FLB), Alá Nazar Baluch, ha afirmado este jueves que está dispuesto a recibir dinero y cualquier otro tipo de ayuda por parte de India, unas palabras que probablemente alarmarán al Gobierno de Pakistán.
"No sólo deseamos que India apoye la lucha nacional baluche de forma diplomática y financiera, sino que esperamos que lo haga todo el mundo", ha señalado en su primera entrevista por videoconferencia en los últimos cinco años.
La petición de ayuda a India formulada por Baluch podría incrementar las sospechas de Pakistán de que India está detrás de las décadas de insurgencia en la provincia, ubicada en la zona occidental del país.
Sin embargo, ha subrayado que el grupo no ha recibido hasta la fecha apoyo económico por parte del Gobierno que encabeza Narendra Modi o de los servicios de Inteligencia de Nueva Delhi.
"Aplaudimos las afirmaciones de Modi en apoyo moral de la nación baluche", ha afirmado Baluch, quien aparece en la entrevista con las ropas tradicionales baluches y con un rifle automático en su regazo.
Baluch es el único líder guerrillero baluche que participa en operaciones contra las fuerzas paquistaníes desde dentro del país, ya que los jefes de los otros dos grupos relevantes se encuentran exiliados en Europa.
La semana pasada, Brahamdagh Bugti, líder del Partido Republicano de Baluchistán afincado en Suiza, afirmó que su intención es pedir asilo político en India. Por el momento Nueva Delhi no se ha pronunciado sobre esta posibilidad.
ATAQUES CONTRA EL "IMPERIALISMO CHINO"
Por otra parte, Baluch ha prometido perpetrar más ataques en el 'pasillo económico chino', parte del cual se encuentra en la citada provincia paquistaní.
La ruta comercial, que cuenta con un valor estimado de 46.000 millones de dólares (unos 40.970 millones de euros) enlazará el oeste de China con las costas paquistaníes del mar Arábigo a través de una red de carreteras, vías de tren y canalizaciones energéticas.
En este sentido, Baluch ha denunciado "los planes imperialistas" de China en el país y ha prometido que los ataques tendrán lugar contra carreteras, miembros de las fuerzas de seguridad y equipos de trabajo vinculados a estos proyectos.