DAR ES SALAM (TANZANIA), 31 (Reuters/EP)
Líderes africanos han pedido el aplazamiento de las elecciones en Burundi durante al menos un mes y medio en un encuentro celebrado este domingo en Tanzania para abordar la crisis política desencadenada en el país africano debido a la decisión de su presidente de presentarse como candidato a un tercer mandato.
"La cumbre ha pedido un aplazamiento de las elecciones en Burundi por un periodo como mínimo de un mes y medio", ha afirmado el secretario general de la Comunidad Africana Oriental (CAO), Richard Sezibera.
Los líderes políticos de Tanzania, Unganda y Kenia, que junto con Burundi y Ruanda forman parte del mercado común de la CAO, han asistido a la cumbre. Además, también les ha acompañado el presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma.
En el encuentro se ha solicitado previamente el aplazamiento de las elecciones hasta que se creen las condiciones adecuadas para votar, dentro del actual mandato del presidente de Burundi, Pierre Nkurunziza, que finalizará en agosto.
Asimismo, los presentes en este encuentro han pedido el desarme urgente de todas las facciones armadas afines a los partidos políticos de Burundi. "Los líderes han estado intentando llevarnos a buen puerto para que podamos ayudar a la población de Burundi en las actuales circunstancias", ha explicado el presidente de Tanzania, Jakaya Kikwete, tras el encuentro.
Nkurunziza sin embargo, no ha asistido al encuentro. En su representación ha ido el ministro de Asuntos Exteriores, Alain Aime Nyamitwe.
CANDIDATURA DE NKURUNZIZA
Las protestas estallaron en el país africano a finales de abril en respuesta a la decisión del presidente Pierre Nkurunziza de volverse a presentar como candidato para las próximas elecciones, algo que las voces críticas califican como una violación de la Constitución.
Las juventudes del partido de Nkurunziza, CNDD-FDD, conocidas como Imbonerakure, han sido acusadas de ser responsables de parte de la violencia que ha sufrido Burundi durante las últimas semanas.
Según el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), más de 90.000 personas han huido de Burundi hacia Tanzania, República Democrática del Congo y también hacia Ruanda, país con el que comparten una mezcla étnica similar y que sufrió un genocidio en 1994 en el que 800.000 personas fueron asesinadas.