BRATISLAVA 16 Sep. (de la enviada especial de EUROPA PRESS Laura García Martínez) -
Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea, a excepción de Reino Unido, han llamado este viernes a la unidad del bloque pese a las consecuencias del 'Brexit' y a las diferencias que les separan, al tiempo que han coincidido en la necesidad de fijar una 'hora de ruta' que ofrezca mayor "protección" y "seguridad" a los europeos para recuperar su confianza.
"Queremos mostrar unidad y que éste es el único proyecto que hay y que debemos continuar con él", ha declarado el primer ministro eslovaco, Robert Fico, a la prensa, a su llegada a la reunión a la que han sido invitados todos los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea, a excepción de Reino Unido.
El objetivo de esta cita es iniciar el "proceso de Bratislava" que marque el paso a seguir en los próximos "seis meses" por la Unión Europea, ha dicho Fico, y que deberá tener continuidad en próximas cumbres en La Valeta y en Roma, esta última en el mes de marzo, cuando se celebren los 60 años de la fundación de la CEE.
Para ello, Fico ha coincidido con el presidente del Consejo europeo, Donald Tusk, en la necesidad de entablar un diálogo "honesto" y franco, que sirva para mostrar "unidad".
"La Unión Europea sólo puede tener futuro si nos mantenemos unidos", ha dicho, por su parte, el primer ministro esloveno, Miro Cerar, para quien no es grave que existan "diferencias" entre los Estados miembros, siempre que mantengan un "enfoque común" para afrontar los problemas que comparten.
Otros líderes como la presidenta lituana, Dalia Grybauskaite, han alertado de que no debe haber espacio para la "fragmentación" y que "no hay más opción" que afrontar las crisis provocadas por el triunfo del 'Brexit', la presión migratoria y la amenaza terrorista, si bien ha descartado que se trate de una "crisis existencial", como han apuntado otros líderes.
El luxemburgués Xavier Bettel también ha apostado por trabajar para resolver los problemas, pero ha querido recalcar que "el 90 por ciento de los instrumentos de la UE funcionan".
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha llegado a la reunión minutos antes de las 10:00 horas sin hacer declaraciones.
NUEVA VISIÓN
Mientras, el primer ministro griego, Alexis Tsipras, ha reivindicado la necesidad de contar con una "nueva visión" con la que enmendar la "dirección equivocada" que ha tomado la UE, por lo que ha abogado por establecer una agenda clara que refuerce la "Europa social".
Francia, que junto a Alemania han retomado el debate sobre la necesidad de una mayor cooperación europea en materia de Defensa, ha pedido al resto de socios que se sumen a sus esfuerzos para una mayor seguridad en el continente.
"Todos deben saber que si Estados Unidos elije alejarse, Europa es capaz de defenderse por sí misma", ha advertido el presidente francés, François Hollande, a su llegada a Bratislava. "Los europeos quieren protección. Protección de sus fronteras, de sus intereses económicos y comerciales, de sus valores y cultura", ha añadido.
SITUACIÓN CRÍTICA
Por su parte, la canciller alemana, Angela Merkel, ha calificado la situación de "crítica" y ha avisado de que la Unión Europea no puede "simplemente esperar" a que se solucionen los problemas que afronta.
Tampoco se lograrán soluciones en una sola cumbre, ha añadido, en alusión a que el objetivo de la reunión de Bratislava es diseñar una 'hoja de ruta' para los próximos seis meses.
El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ha pedido a los líderes europeos "suavizar diferencias", porque a su juicio la unidad entre los Estados miembros es la única vía para que la Unión Europea pueda seguir "funcionando".
El presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, que no ha sido invitado a la cumbre pero asistió la víspera a una cena con Tusk, Juncker y Fico en Bratislava, ha reclamado este viernes a los mandatarios que asuman "la responsabilidad de la Unión que han creado".
"¿Qué tipo de Unión Europea quieren? La UE es tan fuerte como sus Estados miembros quieren que sea", ha asegurado.