BRUSELAS, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los líderes de la Unión Europea han reconocido este viernes la necesidad de "acelerar" los esfuerzos globales para combatir el cambio climático y han remarcado la necesidad de diseñar una estrategia a largo plazo para eliminar las emisiones del CO2 del bloque comunitario, pero han optado por no fijar el año 2050 como plazo para conseguirlo, como propone la Comisión Europea.
Bruselas planteó una serie de escenarios y el más ambicioso proponía alcanzar un escenario de emisiones netas nulas de dióxido de carbono para 2050, una fecha que los jefes de Estado y de Gobierno finalmente no han incluido en el texto de conclusiones que han pactado en el segundo día de cumbre.
El texto, no obstante, enfatiza la importancia de que la UE elabore en 2020 una estrategia a largo plazo que sea "ambiciosa" para alcanzar la "neutralidad climática" en línea con el Acuerdo de París y "teniendo en cuenta las especificidades de los Estados miembros y la competitividad de la industria europea".
La redacción final de los párrafos dedicados al cambio climático ha dividido en dos grupos a los socios comunitarios. Por un lado se encontraban los países que apostaban por establecer 2050 tal y como plantea Bruselas, entre los que se encontraban España, Francia o los países nórdicos, según han informado fuentes comunitarias. Por otro lado, otro grupo, encabezado por los países del Este, mantenía una posición menos ambiciosa.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha valorado en una rueda de prensa posterior a la cumbre que, "sin ser tan ambiciosas (como quisiera España), las conclusiones finales "sí son una señal clara de que la Unión Europea escucha el mensaje" de la gente joven y manifestantes que piden acelerar la lucha contra el cambio climático.
Por su parte, el francés Emmanuel Macron, ha lamentado que las conclusiones son "eminentemente insuficientes" y ha señalado que el compromiso final "no responde ni a la claridad del Acuerdo de París", ni a los datos científicos ni a la "legítima impaciencia" de los jóvenes europeos que se han manifestado recientemente.
En cualquier caso, el texto reconoce "la necesidad de incrementar los esfuerzos globales atajar el cambio climático a la luz de los últimos datos científicos disponibles", en especial el informe de IPCC sobre los efectos de un calentamiento global de 1,5 grados por encima de los niveles preindustriales.
Además, afirma que el cumplimiento de los objetivos del Acuerdo de París "ofrece oportunidades significativas y potencial" para la creación nuevos empleos, el desarrollo tecnológico y el fortalecimiento de la competitividad europea que la UE "debe aprovechar" al mismo tiempo que garantiza "una transición justa y socialmente equilibrada".
Por último, las capitales europeas se han comprometido a "intensificar sus trabajos" sobre la estrategia de la UE a largo plazo en esta materia de cara al debate que mantendrán de nuevo los líderes europeos en la cumbre prevista para junio.