Líderes kurdos sirios expresan su apoyo a una presencia prolongada de las fuerzas de EEUU en Siria

BEIRUT, 16 Nov. (Reuters/EP) -

Líderes kurdos sirios han expresado este miércoles su apoyo a la presencia de las fuerzas de Estados Unidos en el país árabe una vez concluyan las operaciones contra el grupo yihadista Estado Islámico, después de que Washington haya apuntando a que no se retirará hasta que haya avances hacia una solución política.

Los comentarios del lunes del secretario de Defensa estadounidense, James Mattis, han provocado críticas del Gobierno sirio, que ha resaltado que Washington está buscando excusas para mantener su "ocupación ilegal" en Siria.

Sin embargo, Shahoz Hasán, colíder del principal partido kurdo sirio, el Partido de la Unión Democrática (PYD), ha dicho que esta presencia de las fuerzas estadounidenses sería beneficiosa.

El brazo armado del PYD, las Unidades de Protección Popular (YPG), forman parte de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), un grupo de milicias respaldadas por la coalición que lidera Estados Unidos en su ofensiva contra Estado Islámico.

"Sin lograr una solución política a la crisis siria, y con la continuación de las intervenciones turca e iraní en Siria, y la presencia continuada de grupos de Al Qaeda en Siria, la continuada operación de la coalición es mejor", ha dicho Hasán.

Asimismo, la destacada política kurda Fauza Yusef ha resaltado que el papel de Estados Unidos será muy importante en el futuro del país árabe.

"Estados Unidos y las fuerzas de la coalición han jugado un gran papel en la lucha contra DAESH --acrónimo en árabe de Estado Islámico, usado en sentido despectivo--, y para lograr un acuerdo político justo consideramos la necesidad de garantías internacionales", ha sostenido.

En sus declaraciones, Mattis resaltó que el objetivo de las fuerzas estadounidenses en Siria era impedir el regreso de "Estado Islámico 2.0", apuntando que para ello sería necesario una presencia más prolongada.

En respuesta, el Gobierno sirio dijo el martes que la presencia de fuerzas estadounidenses, o de cualquier otro país que no contara con el permiso de Damasco para su despliegue, era un "acto de agresión".