Cataluña no está en la agenda formal pero se abordará si Rajoy lo pide
BRUSELAS, 18 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea se reúnen este jueves y viernes en Bruselas con una extensa agenda en la que no estará la crisis política en Cataluña, salvo que España lo pida, pero sí definirán las prioridades para el proyecto europeo en los próximos dos años y revisarán el estado de las negociaciones con Reino Unido para pactar su salida del bloque.
La discusión del jueves se centrará más en los retos que afronta la Unión Europea en materia de migración, ya que aunque se considera "estabilizada" la entrada irregular de inmigrantes a la UE, la apertura de nuevas rutas y la falta de una fuerte política de asilo común preocupa a los 28.
Los mandatarios también abordarán en el curso de una cena informal los asuntos más urgentes en política exterior como son Corea del Norte, Irán y las relaciones con Turquía, país con el que las tensiones por la violación de Derechos Humanos no hacen aún a la UE plantearse romper vínculos, habida cuenta del éxito del acuerdo para frenar el paso migratorio, según fuentes europeas.
El Brexit será abordado en profundidad el viernes, ya sin la presencia de Reino Unido, para certificar la falta de avances que permitan abrir en otoño la segunda fase para dibujar el futuro de las relaciones y pensar en un periodo transitorio.
Sin embargo, se espera que la primera ministra británica, Theresa May, ofrezca en la cena de este jueves una visión más clara a sus todavía socios sobre el impulso que quiere dar a las próximas rondas de negociaciones.
Bruselas afea a Londres la falta de concreción en cuanto a la factura de salida, que la UE estima informalmente en más de 50.000 millones pero la parte británica reduce a 20.000 millones. El negociador europeo, Michel Barnier, dijo al término de la última ronda que este problema tenía en "punto muerto" las negociaciones.
Además de los compromisos financieros que Reino Unido debe asumir pese a su salida del club, los 27 quieren cerrar también otros dos asuntos clave: que no se vea dañada la paz en el Úlster por la nueva frontera y que se garanticen los derechos de los ciudadanos comunitarios en suelo británico una vez se consume el divorcio.
CATALUÑA PREOCUPA, PERO NO ESTÁ EN LA AGENDA
Los líderes no llevarán en la agenda de la cumbre la crisis política en Cataluña, a pesar de que este mismo jueves expira el plazo del requerimiento dado al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, para que aclare si ha proclamado la independencia de la región de manera unilateral, lo que podría llevar al Gobierno a activar este mismo día el artículo 155 de la Constitución.
Sin embargo, el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, podría incluirlo si así lo solicita el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, según han señalado fuentes europeas. Rajoy, por su parte, no contempla esta posibilidad.
"No tenemos la intención de ponerlo en la agenda, pero, claro, si el presidente Rajoy quisiera hablar de ello, lo reflejaremos en la agenda", ha apuntado un alto funcionario europeo interrogado sobre si el desafío independentista será tema de discusión.
Rajoy, por su parte, "no tienen intención de abordar este tema", pero si alguno de sus colegas europeos se "interesan" por la situación en Cataluña el presidente del Gobierno "hablará y explicará" el contexto de la crisis, han explicado fuentes del Gobierno.
En las últimas semanas desde las instituciones europeas se ha reconocido de manera informal que la UE sigue la situación en Cataluña "con preocupación", pero que considera que es una crisis de carácter "interno" que debe resolver España dentro de los límites que marca su Constitución.
En público también países como Alemania o Francia han apelado al diálogo dentro del orden constitucional y defendido la unidad de España. También los presidentes del Consejo Europeo, Donald Tusk, y de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, han rechazado la declaración unilateral de independencia.