VIENA/BUDAPEST, 5 Sep. (Reuters/EP) -
Decenas de refugiados han ido atravesando la frontera de Hungría a Austria el sábado, después de llegar por el oeste hasta la frontera en autobuses fletados por un abrumado Gobierno húngaro que pese a comprometerse a detener la ola de inmigrantes finalmente se ha rendido ante las masas de refugiados que decidieron salir a pie para llegar a Europa Occidental.
Después de días de incidentes constantes en los que los inmigrantes han tratado de subirse a trenes con los que seguir su ruta hacia el centro de Europa, el Gobierno húngaro anunció el viernes que trasladaría a grupos de refugiados en autobús hacia la frontera con Austria.
Un fotógrafo de la agencia de noticias Reuters ha visto cómo decenas de inmigrantes, entre ellos refugiados procedentes de la guerra en Siria, caminaban hacia Austria, quien ha asegurado junto a Alemania que les garantizará el acceso al país, independientemente de las normas de la Unión Europea.
La estación de ferrocarril de Keleti en la capital húngara, que durante días ha sido zona de acampada para los inmigrantes a los que se les prohibió acceder a los trenes en dirección al oeste, hacia Austria y Alemania, se vació rápidamente mientras las sonrientes familias embarcaban en una larga cola de autobuses, dejando tras de sí zapatos, ropa y colchones.
Después de días de confrontación y caos, el Gobierno de extrema derecha de Hungría se comprometió a trasladar a los inmigrantes que se encontraban en Budapest y a unos 1.200 que decidieron continuar su viaje a Viena caminando, grupo encabezado por un refugiado sirio con una sola pierna que gritaba en su camino "¡Alemania! ¡Alemania!".
Hungría ha basado su decisión en la seguridad del tráfico, aunque parece ser una admisión de que el Gobierno ha perdido el control ante el abrumador número de personas determinadas a llegar al centro de Europa tras huir de la guerra y la pobreza en Oriente Próximo, África y Asia.
"Debido a la situación de emergencia en la frontera con Hungría, Austria y Alemania acuerdan en este caso continuar el viaje de los refugiados a sus países", ha asegurado el canciller austriaco, Werner Faymann, en su página de Facebook.
Por su parte, Cruz Roja de Austria había anunciado que esperaba que llegaran entre 800 y 1.500 personas a su centro de acogida de refugiados en Nickelsdorf, en la frontera húngara, a lo largo de la noche.