CIUDAD DE MÉXICO, 18 Feb. (Reuters/EP) -
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha afirmado este lunes que no se enfrentará a la Iglesia católica por los casos que puedan destaparse de pederastia, pero ha advertido de que no será "cómplice" de la institución si hay procesos legales en curso.
La conferencia episcopal mexicana informó hace unos días de que al menos 152 sacerdotes han sido suspendidos en los últimos nueve años por abusos sexuales a menores de edad en México. Algunos de ellos ya están en la cárcel.
"No queremos confrontarnos con las iglesias, así de claro", ha respondido López Obrador al ser interrogado al respecto durante su rueda de prensa diaria. "Si hay un proceso legal pues no podemos taparlo, no podemos ser cómplices, eso no lo haríamos, pero no vamos a atizar el fuego en ningún caso", ha añadido.
El Vaticano acogerá esta semana una cumbre antipederastia, en el marco de la voluntad del Papa Francisco para atajar lo que considera "un desafío urgente". Las sesiones reunirán a 190 participantes, entre presidentes de todas las Conferencias Episcopales del mundo, religiosos y otros expertos que debatirán durante tres días sobre cómo atajar el problema de los abusos sexuales en la Iglesia católica.