PARÍS, 25 Abr. (EUROPA PRESS) -
El líder del movimiento En Marche!, Emmanuel Macron, ha advertido de que "no hay nada ganado" de cara a la segunda vuelta de las elecciones presidenciales y ha llamado a generar un "despertar colectivo" para frenar las aspiraciones de la candidata del Frente Nacional, Marine Le Pen, su rival directa el próximo 7 de mayo.
Durante una visita a un hospital, Macron ha dicho sentirse "orgulloso" de haber logrado superar a Le Pen en la primera ronda. El exministro obtuvo el 24,01 por ciento de los votos, frente al 21,30 por ciento obtenido por la dirigente ultraderechista.
Aunque todas las encuestas le dan por vencedor y la mayoría de la clase política ha salido en tromba para pedir el voto a su favor, Macron ha subrayado que "no hay nada ganado". "Yo mismo soy el ejemplo claro de que los pronósticos fracasan. Hay que luchar, querer, explicar, llevar. Es lo que voy a hacer", ha dicho Macron, según medios franceses.
El candidato ha concedido poco después una entrevista a la cadena France 2 en la que ha reivindicado la necesidad de un "despertar colectivo" para frenar a Le Pen, cuyo mensaje "no interesa a la República". En este sentido, ha recriminado que la clase política haya "normalizado" la presencia del Frente Nacional, una formación al alza en los comicios que se han venido celebrando en los últimos años.
Macron ha defendido que su programa promueve una sociedad "más equitativa y más justa" y ha negado que tenga "un proyecto ingenuo de globalización", como le recrimina Le Pen. Para el exministro, "no tiene sentido" que el Frente Nacional quiera romper lazos con Europa.
El vencedor de la primera vuelta se ha marcado como su principal "misión" para las próximas dos semanas la de "reagrupar" a los franceses que no quieren tener a Le Pen como presidenta y ha anunciado que no variará las posiciones que ha venido manteniendo en los últimos meses. "No voy a salir delante de las cámaras porque lo haga Le Pen", ha aclarado.
"Tengo un proyecto que es claro. Ahora, quiero convencer", ha añadido Macron, que ha echado en falta un apoyo explícito por parte del líder de Francia Insumisa, Jean-Luc Mélenchon. Así, se ha declarado "triste" por el hecho de que el político izquierdista no haya dado ninguna consigna de voto y se haya limitado a abrir una consulta entre sus simpatizantes.