Macron inaugura la mayor planta solar de África occidental en Burkina Faso

Macron durante la inauguración de la mayor planrta solar de África occidental
REUTERS / POOL NEW
Actualizado: miércoles, 29 noviembre 2017 20:06

ZAGTOULI (BURKINA FASO), 29 (Reuters/EP)

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha inaugurado este miércoles en Burkina Faso la mayor planta de energía solar que se ha instalado en el oeste de África, al tiempo que ha instado a las empresas francesas a crear alianzas que permitan desarrollar futuros proyectos relacionados con el uso de energía renovable en el continente.

Esta planta, con una capacidad de 33 megavatios, ha sido construida en una zona montañosa a las afueras de la capital, Uagadugú, por parte de la empresa industrial francesa Vinci. Esta infraestructura suministrará energía a unos 110.000 hogares.

A pesar de este acuerdo, el uso de energía renovable en África sigue siendo escaso. La tasa de electrificación superó al crecimiento de la población por primera vez en 2014, pero según la Agencia Internacional de la Energía (AIE), en algunos países africanos el déficit energético sigue creciendo.

La corrupción, los trámites burocráticos y la pobre financiación de las empresas energéticas locales han provocado que los inversores actúen con cautela.

Macron, cuyo viaje a Burkina Faso ha sido un intento de cambiar las relaciones de Francia con África, ha asegurado que es el momento de convertir los objetivos establecidos en 2015 en el Acuerdo de París sobre cambio climático en acciones concretas sobre el terreno.

"Espero que Francia, sus empresas y sus proyectos operativos sean vuestro aliado preferente en energías renovables", ha afirmado Macron durante la ceremonia inaugural.

Por su parte, el presidente de Burkina Faso, Roch Marc Kaboré, ha destacado que un plan de energía solar llamado Light añadirá unos 50 megavatios adicionales de capacidad en 2018, en un país donde solo una de cada cinco personas tiene electricidad en su vivienda.

600 MILLONES DE PERSONAS SIN ELECTRICIDAD

En el África subsahariana, más de 600 millones de personas viven sin acceso a electricidad. El déficit de energía ha paralizado la industria y ha entorpecido el crecimiento económico.

Según ha informado la AIE, la región, de una población de unos 1.000 millones de habitantes, cuenta con instalaciones eléctricas con una capacidad de unos 122 gigavatios. España, con una población de 46 millones, tiene la misma capacidad aproximadamente.

Las estimaciones de la AIE han puesto de manifiesto que para el año 2030 se duplicará dicha capacidad energética hasta los 253 gigavatios. Esta labor se conseguirá gracias al uso de la energía hidroeléctrica y el sol como principales fuentes de energía.

No obstante, el grupo consultor Mckinsey and Company ha advertido de que aún es posible que se produzca un incremento de la demanda durante las próximas tres décadas desde 2010 a 2040.

En los últimos años, las empresas chinas se han expandido en el sector energético de África, convirtiéndose en las responsables de un 30 por ciento de la nueva capacidad que ha adquirido el continente. Sin embargo, este crecimiento puede ser lento.

CANSADOS DE OSCURIDAD

En 2015, la Iniciativa Africana de Energía Renovable (AREI, por sus siglas en inglés) se comprometió a acelerar la generación de electricidad en un continente "cansado de estar en la oscuridad". Esta promesa se produjo en el marco de los Acuerdos de París.

Dicha iniciativa incluiría destinar 10.000 millones de dólares --unos 8.431 millones de euros-- para financiar un aumento de 10 gigavatios de capacidad a las redes energéticas africanas en el año 2020, que se incrementarían con 300 gigavatios más en 2030.

Sin embargo, la iniciativa aún no ha alcanzado grandes avances. Datos de la AIE han advertido de que 19 proyectos de producción combinada lanzados con el objetivo de incrementar la capacidad energética en un 1,8 gigavatios fueron preseleccionados en marzo y aún siguen existiendo grandes agujeros de financiación.

El vicepresidente de desarrollo empresarial en África para la empresa francesa de energía renovable EREN, Christophe Fleurence, ha asegurado que la crisis financiera de muchas de las empresas energéticas del país ha desalentado a los inversores.

GARANTÍAS SÓLIDAS

"Los generadores de energía deben asegurarse de tener garantías sólidas de que se les pagará", ha señalado Fleurence, cuya compañía es propietaria parcial de la empresa Total y desarrolla proyectos que aportan un total de 350 gigavatios a África.

"Pedirán garantías estatales o seguros contra incumplimientos. Esto significa que los proyectos se volverán muy complejos y llevaran mucho tiempo para articularse", ha explicado el vicepresidente de EREN.

Fabian Jochem, el director de SMA Sunbelt Energy --una filial de SMA Solar, la empresa de energía solar más grande de Alemania-- ha advertido de que las aseguradoras pueden no estar dispuestas a asumir el riesgo de proyectos que suelen ser pequeños y de carácter local.

Jochem ha subrayado que muchos clientes en África no son "financiables", al tiempo que ha explicado que esto significa que no obtendrían seguros para afrontar los "posibles incumplimientos de pago". Por último, ha resaltado que para las aseguradoras, los costes de transacción son "demasiado altos" en comparación al tamaño de los proyectos.

Leer más acerca de: