PARÍS, 2 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha visitado esta mañana el Arco del Triunfo de París nada más regresar de la cumbre del G-20 de Argentina para examinar de primera mano los daños causados por los disturbios del sábado, los más violentos de hace una década en la capital francesa.
Al tiempo que Macron visitaba el interior del monumento, epicentro de los disturbios durante una nueva manifestación del movimiento de protesta de los "Chalecos amarillos", un nuevo balance policial ha elevado la cifra de heridos a 133, y los detenidos a 412, de los cuales 378 siguen todavía en dependencias policiales.
El interior del Arco del Triunfo ha recibido daños de consideración por actos vandálicos, según hizo saber el director del Centro de Monumentos Nacionales de Francia, Philippe Bélaval y se suma a otros lugares de la capital afectados por los enfrentamientos, como las galerías comerciales Lafayette y varios negocios.
Tras visitar el Arco del Triunfo, Macron sostendrá una reunión de emergencia con el primer ministro, Édouard Phillipe, y el ministro del Interior, Christophe Castaner, para discutir los disturbios y la manera de iniciar un diálogo con un movimiento de protesta que, hasta el momento, no tiene una estructura o liderazgo real, y tiene como objetivo principal la eliminación del impuesto añadido a los carburantes, parte del plan de eficiencia energética impulsado desde el Gobierno francés.
En un caso extremo, Macron podría ordenar la declaración del estado de emergencia si persisten los disturbios, según ha declarado este domingo el portavoz del gobierno, Benjamin Griveaux. "Tenemos que pensar en las medidas que se pueden tomar para que estos incidentes no vuelvan a suceder", dijo Griveaux a la radio Europe 1.