MADRID, 27 Sep. (EUROPA PRESS) - El presidente de Venezuela solicita a la ONU una investigación sobre el ataque con drones del 4 de agosto El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha asegurado este miércoles que está dispuesto a "estrechar la mano" del mandatario de Estados Unidos, Donald Trump, y a "dialogar sobre los asuntos bilaterales", pese a la "conspiración" y la "agresión permanente" que le atribuye a la Administración norteamericana. Trump ya se ofreció el martes a reunirse con Maduro, tan solo un día después de dar unas controvertidas declaraciones en las que consideró que el Gobierno podría ser derrotado con facilidad por el Ejército. El presidente venezolano ha recogido el guante desde el atril de la Asamblea General de la ONU. "A pesar de todas las diferencias que pudieran considerarse abismales, (...) estaría dispuesto a estrechar la mano del presidente de los Estados Unidos, a sentarme a dialogar sobre los asuntos de las diferencias bilaterales y los asuntos de nuestra región que así sean considerados", ha declarado Maduro. Venezuela, ha añadido, es un "país amigable" que "no odia" a Estados Unidos. "¿Qué tenemos diferencias presidente Donald Trump? Claro que las tenemos, pero son los diferentes los que deben dialogar, ha añadido Maduro, dispuesto a hablar con una "agenda abierta" y "con humildad" en aras del entendimiento mutuo. Sin embargo, Maduro no ha escatimado en críticas contra Washington en su discurso, en el que ha cuestionado las "amenazas" de Trump contra el sistema internacional y la "agresión" que se estaría planificando sobre Venezuela, un país que históricamente "se ha negado a rendirse a imperios esclavistas". El presidente estadounidense insistió el martes en que la situación que atraviesa el país "es una desgracia" y ha dejado claro que "todas las opciones están sobre la mesa, todas". "Las más fuertes y las menos fuertes y ya sabéis a lo que me refiero con fuertes", advirtió. PIDE UNA INVESTIGACIÓN La sombra de Estados Unidos sobrevuela también el ataque con drones perpetrado el 4 de agosto en Caracas, del que Maduro ha responsabilizado a opositores internos y a funcionarios de gobiernos extranjeros. El líder chavista ha solicitado a la ONU el lanzamiento de una investigación independiente para esclarecer las circunstancias del suceso y depurar responsabilidades. "Venezuela está en el ojo de mira de una campaña y política que parece no tener fin", ha lamentado Maduro, para quien el ataque que "habría arrojado una masacre, el asesinato de todo el alto mando institucional, político y militar" tiene implicaciones fuera de las fronteras del país sudamericano. Así, ha apuntado que "todas las investigaciones conducen a que el atentado terrorista se preparó, financió y planificó desde territorio de Estados Unidos", algo que el Gobierno de Maduro ya habría dado a conocer por "vía diplomática" mediante una queja en la que se incluirían los nombres y las pruebas sobre los supuestos responsables. Maduro, que ha pasado de puntillas por la crisis interna que atraviesa Venezuela, ha defendido que gobierna una "democracia constitucional, robustecida" y ha presumido de desarrollo nacional. "Hoy estamos más fuertes que nunca", ha proclamado en la sede de la ONU. "Traemos buenas noticias del esfuerzo de recuperación económica nacional mediante un programa que logra posicionar las bases de crecimiento sostenible rumbo a un nuevo modelo social", ha agregado el presidente venezolano.