CARACAS, 23 Ago. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha rechazado este sábado reabrir la frontera con Colombia "hasta que no se restablezca la paz", según ha informado la agencia estatal venezolana de noticias, AVN.
"Mientras tanto no se restablezca (la paz), yo no voy a abrir esa frontera. Hasta tanto no se restablezca y dejen el ataque desde Colombia contra nuestra economía no la voy a abrir, y si quieren digan lo que digan de mí, pero es mi responsabilidad", ha dicho.
Asimismo, ha aplaudido la decisión de adelantar al miércoles la reunión entre las ministras de Exteriores de Venezuela y Colombia, Delcy Rodríguez y María Ángela Holguín, respectivamente, recalcando que en la misma se intentará volver a la normalidad en la frontera.
Horas antes, el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, denunció que el cierre de la frontera supone un perjuicio para "mucha gente" de ambos lados de la frontera. "Cerrar la frontera trae inconvenientes, genera malestar, se pone a mucha gente inocente a pagar platos rotos, incluso niños", afirmó.
Para Santos, la respuesta a la inseguridad "no es cerrar la frontera" y ha defendido en cambio la cooperación. "Tenemos los mismos objetivos, estamos buscando sacar del juego a bandas criminales dedicadas al narcotráfico (...) cuando se cierra la frontera y no hay coordinación los únicos que ganan son los delincuentes", añadió.
Ahora la prioridad, según Santos, es ver cómo se ayuda a los colombianos afectados mientras se arregla la situación con Venezuela por vías diplomáticas. "Si cooperamos los únicos que pierden son los delincuentes, pero si se cierra la frontera y no hay coordinación los únicos que ganan son los delincuentes", remachó.
CRISIS BILATERAL
La tensión entre Colombia y Venezuela se ha disparado esta semana debido al ataque que tres miembros de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) sufrieron por parte de "paramilitares" desde el lado colombiano.
En respuesta, Maduro ordenó el jueves el cierre de los pasos fronterizos de San Antonio del Táchira y Ureña durante 72 horas, lo que ha afectado a unos 200.000 colombianos, así como al tráfico comercial, de acuerdo con la Casa de Nariño.
Maduro ha ordenado igualmente "tomar medidas extraordinarias" para "extirpar la raíz criminal en la frontera" que pasan, principalmente, por mantener "al máximo nivel" la presencia policial y militar en la línea limítrofe.
El líder 'chavista' ha achacado este aumento de la violencia al incesante flujo de colombianos a Venezuela, algunos de los cuales "vienen huyendo de la guerra", si bien otros "han traído el fenómeno del tráfico de drogas".
Maduro ha recordado que Venezuela "es un país del tercer mundo que también está intentando superar la pobreza", por lo que ha llegado "al punto límite del éxodo que puede aguantar". "Hay que hacer un plan especial humanitario y pido apoyo internacional", ha dicho.