Habla de "violación de los acuerdos" y achaca la inestabilidad a la intervención de la OTAN en 2011 en Libia
MADRID, 18 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Malí ha reclamado este viernes a Francia que "retire sin mayores retrasos" a los efectivos de la operación 'Barkhane' y la Fuerza Takuba, antes de incidir en que el anuncio del repliegue de fuerzas internacionales "viola los acuerdos que vinculan a Francia y Malí e implican a otros socios".
"Ante las reiteradas deficiencias en los acuerdos de defensa, el Gobierno invita a las autoridades francesas a retirar, sin mayores retrasos, a las fuerzas 'Barkhane' y Takuba del territorio nacional, bajo supervisión de las autoridades malienses", ha dicho el Ejecutivo de transición en un comunicado.
Así, ha dicho que "toma nota" de la "decisión unilateral" del jueves sobre la retirada de tropas internacionales y ha hecho hincapié en que llega tras "los anuncios igualmente unilaterales de Francia" sobre la reducción de operaciones de 'Barkhane' durante los últimos meses.
Las autoridades de transición ha recalcado que "estas decisiones unilaterales constituyen violaciones flagrantes del marco jurídico que vincula a Francia y Malí" y ha apuntado que los resultados en materia antiterrorista "no son satisfactorios".
El Gobierno maliense ha resaltado que la operación 'Serval' fue desplegada en 2013 para "destruir el terrorismo, restaurar la autoridades del Estado maliense en todo el territorio nacional y hacer que se apliquen las resoluciones de la ONU", mientras que en 2016 se activó la operación 'Barkhane' para "luchar contra el terrorismo, ayudar a hacer ganar fuerza al Ejército maliense e intervenir en favor de las poblaciones".
"Pese a la presencia de la operación 'Barkhane' y las fuerzas internacionales entre 2013 y 2021, Malí está en riesgo de partición y la amenaza terrorista inicialmente localizada en el norte de Malí se ha expandido a la totalidad del territorio nacional", ha argumentado.
CAMBIOS EN EL CONTEXTO EN EL SAHEL DESDE 2011
En esta línea, ha recordado que "la operación 'Serval' no habría sido necesaria si la OTAN no hubiera intervenido en Libia en 2011". "Esta intervención, con modificó de forma fundamental el marco securitario en la región y en la que Francia jugó un papel activo de primer nivel y para disgusto de los africanos, es la base de los problemas de seguridad actuales en Malí en particular y en el Sahel en general", ha explicado.
"En contra de las afirmaciones sobre una degradación de la situación de seguridad, las autoridades de transición, en el ejercicio de su derecho soberano, han llevado a cabo acciones para diversificar las asociaciones, con enormes esfuerzos, permitiendo un mayor impulso de las Fuerzas Armadas y una mejora significativa de la situación de seguridad sobre el terreno, tras seis mees, principalmente para generar las condiciones para celebrar elecciones", ha reseñado.
Asimismo, ha recordado que ha puesto en marcha un mecanismo de concertación con la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO), la Unión Africana (UA), Naciones Unidas y ciertos países de la región para adoptar un calendario "consensuado" para "un retorno rápido al orden constitucional".
El Gobierno de transición ha reclamado además a las "valientes" Fuerzas Armadas y fuerzas de seguridad que mantengan su "vigilancia y determinación" en sus misiones y ha "reconocido los sacrificios" en la lucha contra el terrorismo, antes de presentar sus condolencias a las víctimas de la inseguridad, "civiles y militares, malienses y extranjeros".
"El Gobierno reafirma su disponibilidad a reforzar el diálogo y la cooperación con los socios que ansiosos por tener en cuenta los intereses vitales de Malí, respetando la soberanía nacional y la dignidad del pueblo maliense", ha manifestado, antes de hacer un llamamiento a la población a "permanecer serena y vigilante".
EL ANUNCIO DE RETIRADA
Durante la jornada del jueves, los gobiernos de Francia y el resto de los países europeos y Canadá que participan y colaboran con la operación 'Barkhane' y la Fuerza Takuba anunciaron la retirada de sus fuerzas de Malí, donde estaban desplegadas para ayudar a Bamako en la lucha contra el yihadismo.
"Ante las múltiples obstrucciones de las autoridades de transición maliense, Canadá y los países europeos que operan al lado de la operación 'Barkhane' y en el seno de la Fuerza Takuba estiman que las condiciones políticas, operacionales y jurídicas no están en marcha para llevar a cabo de forma eficaz su despliegue actual en la lucha contra el terrorismo en Malí", señalaron en un comunicado.
Así, resaltaron que "han decidido iniciar la retirada coordinada del territorio maliense de sus respectivos medios militares dedicados a estas operaciones". "En estrecha coordinación con los estados vecinos, también han expresado su deseo de mantener su papel en la región, respetando los procedimientos constitucionales respectivos", agregaron.
Tras ello, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, aseguró que el proceso de retirada de tropas francesas de Malí llevará "entre cuatro y seis meses", antes de desvelar que los militares europeos presentes en Malí serán "reposicionados" en Níger, "en la región fronteriza con Malí", tras un acuerdo con Niamey.
Las tensiones han ido al alza durante los últimos meses por el anuncio de la junta militar, liderada por Assimi Goita, de alargar el proceso de transición a entre cuatro y cinco años y de aplazar las elecciones previstas para marzo, en medio de los cruces de acusaciones entre París y Bamako sobre los esfuerzos en materia antiterrorista.
Goita encabezó un golpe de Estado en agosto de 2020 que derrocó al entonces presidente, Ibrahim Boubacar Keita, tras lo que fueron instauradas unas autoridades de transición derribadas en una segunda asonada en mayo de 2021 que elevó a Goita a presidente y desembocó en una prolongación del periodo de transición.
Asimismo, las autoridades francesas, al igual que otros países occidentales, se han mostrado igualmente muy críticas con la junta por el supuesto despliegue de mercenarios del Grupo Wagner, algo que ha sido negado desde Bamako y Moscú, que hablan de cooperación militar regular.