LA VALETA, 3 Jun. (Reuters/EP) -
Malta celebra este sábado unas elecciones anticipadas que el primer ministro, Joseph Muscat, ha vendido como un voto de confianza hacia su Gobierno, con el objetivo de hacer frente a las acusaciones de corrupción que han ensombrecido la labor del actual Ejecutivo.
Las encuestas de opinión dan la victoria al Partido Laborista de Muscat aunque con una ventaja más reducida que en 2013, cuando cosecharon un triunfo aplastante tras 15 años de oposición.
Cuando Muscat, cuyo mandato de cinco años terminaría el año que viene, convocó elecciones adelantadas el mes pasado afirmó que eran vitales para contrarrestar las acusaciones de corrupción que podrían crear incertidumbre y dañar la economía.
Para Muscat, su Gobierno ha dado a Malta "los mejores tiempos" al lograr un crecimiento del PIB del 6 por ciento en términos reales, ha bajado el desempleo a su mínimo histórico y ha aumentado salarios y pensiones.
"Mi deber no es sólo protegerme, sino también salvaguardar a mi país, y no toleraré una situación en la que se pierdan puestos de trabajo debido a la incertidumbre. No podemos permitir que la incertidumbre frene el ritmo del milagro económico de Malta", explicó el primer ministro el 1 de mayo al convocar las elecciones anticipadas.
Antes de eso, el principal partido de la oposición, el Partido Nacionalista, había pedido al primer ministro que dimitiera por las sospechas sobre los negocios de su mujer y algunos de sus socios. Daphne Caruana Galizia, la bloguera que hizo las acusaciones de corrupción, ha defendido que varios documentos de un pequeño banco con sede en Malta muestran que Michelle Muscat era la dueña de una empresa en Panamá y que se habían movido grandes sumas de dinero hacia cuentas bancarias en Azerbaiyán.
El Partido Nacionalista también ha acusado al jefe de gabinete de Muscat, Keith Schembri, de recibir sobornos por la venta de pasaportes en una Plan de Ciudadanía por Inversión muy controvertido y al ministro Konrad Mizzi de recibir sobornos por el proyecto de una central eléctrica.
Muscat, Schembri y Mizzi han negado todas las acusaciones y han iniciado acciones legales. El presidente ha descrito las acusaciones contra su mujer como "la madre de todas las mentiras".
Durante un mitin el pasado domingo, la oposición defendió que las elecciones son un tema de principios: "No es suficiente que la economía esté bien, el dinero no es todo, nuestros valores y nuestros principios son lo primero".