Los manifestantes han logrado poner en libertad a un expresidente y a dos ex primeros ministros, quienes cumplían condenas por delitos de corrupción
Al menos un fallecido y 590 heridos en los enfrentamientos entre la Policía y manifestantes
MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
El presidente de Kirguistán, Sooronbái Zheenbékov, ha denunciado este martes un intento de "usurpar" el poder por parte de algunas fuerzas políticas "con el pretexto de las elecciones", después de los fuertes altercados que se produjeron durante las protestas del lunes, a causa de las denuncias de un supuesto fraude electoral en las legislativas del 4 de octubre.
"Anoche algunas fuerzas políticas intentaron usurpar el poder estatal, alteraron el orden público con el pretexto de las elecciones, interrumpieron la vida pacífica de la gente del pueblo, desobedecieron a la policía, golpearon a los médicos y destruyeron edificios", ha afirmado Zheenbékov a través de un comunicado.
"He ordenado a las fuerzas del orden que no dispararan, no habrá derramamiento de sangre y no habrá vidas en peligro. Hasta ahora, hemos tomado todas las medidas posibles para evitar agravar la situación. La paz del Estado y la estabilidad de la sociedad son más altas que cualquier mandato parlamentario", ha aseverado.
En la misma nota, Zheenbékov ha confirmado que sopesa la posibilidad de anular los resultados electorales del domingo, después de los enfrentamientos entre la Policía y los manifestantes, que finalmente han logrado irrumpir en la sede del Parlamento, que es también la del Gobierno del actual primer ministro, Kubatbek Boronov.
"Considerando la situación actual, el jefe de Estado ha recomendado a la Comisión Electoral Central estudiar detenidamente las denuncias de irregularidades y, si fuese necesario, anular los resultados de las elecciones parlamentarias", avanzó en un primer momento la portavoz de la Presidencia, Tolgonái Stamalíeva, a la agencia rusa Sputnik.
La portavoz informó también de que Zheenbékov no ha abandonado Biskek, la capital y el principal escenario de las protestas, y señaló que el presidente confía en que "todas fuerzas políticas pondrán los intereses de la nación por encima de los suyos propios e impedirán la división social" de Kirguistán.
Horas antes el portavoz del partido más votado en las legislativas, el Birimdik, Adilet Sultanalíev, ya comunicó a través de Twitter que estaban dispuestos a repetir las elecciones y pidió al resto de fuerzas políticas que lograron obtener representación que actuasen de la misma forma.
LIBERACIÓN DE ANTIGUOS ALTOS CARGOS
Durante las protestas, varios antiguos altos cargos de Kirgustán, entre ellos el exprimer ministro Sapar Isakov (2017-2018), han sido liberados en la noche del lunes por parte de los manifestantes.
Isakov ha sido trasladado a la capital, Biskek, después de ser liberado por los manifestantes, según ha revelado el portal Super.kg. El que fuera primer ministro entre 2017 y 2018 fue sentenciado en diciembre de 2019 a casi una treintena de años por varios delitos de corrupción, entre ellos el de malversación de fondos.
La misma suerte ha corrido el también antiguo primer ministro Zhantoro Satybaldiyev (2012-2014), cuyos simpatizantes han logrado poner en libertad, después de que fuera sentenciado a más de siete años de cárcel por corrupción.
En la noche del lunes también ha sido liberado el expresidente Almazbek Atambáev (2011-2017), condenado a once años de prisión por corrupción y vínculos con organizaciones criminales en junio de 2020.
Los manifestantes también han logrado finalmente irrumpir en el Parlamento, después de varias horas de asedio, de acuerdo con las imágenes y los vídeos que se han difundido por internet y de los que se han hecho eco los medios kirguís, que informan del lanzamiento de cócteles molotov sobre la que es también sede del Gobierno.
DISTURBIOS Y ENFRENTAMIENTOS CON LA POLICÍA
Al menos una persona ha muerto y 590 han resultado heridas de diversa consideración debido a los enfrentamientos que han tenido lugar este lunes por los resultados de las elecciones legislativas del domingo en Kirguistán, según el Ministerio de Salud.
Unos 2.000 manifestantes han reclamado la dimisión del presidente del país, Sooronbai Jeenbekov, así como la anulación de los resultados y la convocatoria de una nueva votación, según ha recogido el portal kirguís de noticias 24kg.
Ante esta situación, el Ministerio del Interior ha pedido a los organizadores de la protesta que pidan a los manifestantes que se retiren de la zona. Así, ha denunciado que "intentaron derribar las puertas metálicas del edificio del Parlamento y lanzaron piedras".
Según el citado medio local, el exviceministro de Economía Eldar Abakirov, del opositor Ata Meken, ha resultado herido en los incidentes. El Ministerio ha destacado que los incidentes derivados de estas manifestaciones recaen sobre los organizadores.
"ACUSACIONES CREÍBLES DE COMPRA DE VOTOS"
Las legislativas, en las que las fuerzas presidencialistas y prorrusas lograron afianzar su presencia en el Parlamento, han quedado empañadas por "acusaciones creíbles de compra de votos", según los observadores de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).
Unos 3,5 millones de personas estaban llamadas a votar en unos comicios que, en términos generales, estuvieron "bien gestionados" y en los que los candidatos pudieron hacer campaña con libertad. El responsable de la misión de la OSCE, Thomas Boserup, ha admitido que el proceso se desarrolló "en circunstancias muy complicadas".
Para Boserup, "fue decepcionante ver la falta de información crítica en los medios", en los que la mayor parte de la campaña correspondió a anuncios pagados. Este hecho "redujo tanto la calidad como la variedad de información disponible para los votantes", ha advertido, según un comunicado de la OSCE.
Entre las "preocupaciones", los observadores han incluido los casos de intimidación y los bloqueos de actos de campaña, así como la falta de transparencia en las donaciones durante la campaña, pero ha hecho especial hincapié en la posible compra de votos, sin aludir a ningún ejemplo concreto.
Las dos fuerzas prorrusas y partidarias del presidente del país --el recién formado partido socialdemócrata Birimdik (Unidad) y el conservador Mekenim Kirguistán (Kirguistán es mi Patria)-- han sido las fuerzas más votadas, después de sumar cada una de ellas casi una cuarta parte de los votos depositados el domingo.
Durante la jornada, los líderes de doce partidos políticos que participaron en las elecciones han presentado una demanda ante la comisión electoral para que anule los resultados.