Más de 10 millones de personas están en riesgo en Etiopía por la sequía

MADRID, 23 May. (EUROPA PRESS) -

La ONG Oxfam Intermón ha alertado este lunes a través de un comunicado de que más de diez millones de personas en Etiopía sufren escasez de comida y agua a causa de la sequía.

La sequía se ha visto agravada por el fenómeno climático de El Niño, que se origina a causa del calentamiento del océano Pacífico y este año ha afectado a 60 millones de personas y en Etiopía ha provocado que los cultivos se secaran, provocando una escasez de comida y pasto para el ganado.

La ayuda que Etiopía ha recibido representa solo un 54 por ciento de la que necesita, por lo que los recursos solo durarían hasta el mes de junio. Por su parte, el Gobierno ha lanzado el Programa Red Segura de Producción, que busca apoyar a campesinos y pastores dotándoles de alimentos y otras necesidades básicas.

"El cambio climático está contribuyendo a fenómenos meteorológicos extremos, que son cada vez más frecuentes. Los agricultores son uno de los colectivos más vulnerables, por ello es necesaria una mayor inversión en la gestión de los recursos naturales y en las prácticas agrícolas. También se necesita un mejor acceso al agua, a los mercados y, en particular, a la información sobre el clima. Y, en caso necesario, debe apoyarse a las poblaciones con ayuda para la subsistencia", ha declarado la directora humanitaria de Oxfam Intermón, Barbara Mineo.

Actualmente, la probabilidad de que una vez finalizado el fenómeno El Niño tenga lugar La Niña, que provoca el efecto contrario, es de un 75 por ciento. En otras ocasiones, el fenómeno La Niña ha provocado lluvias torrenciales que han llegado incluso a obligar a más de 230.000 personas a desplazarse.

Oxfam Intermón ha lamentado que, a pesar de ser una crisis de proporciones globales, los efectos que estos fenómenos naturales están causando no están llamando la suficiente atención por parte de la comunidad internacional y ha recalcado que se necesita una solución a largo plazo para que los gobiernos y la comunidad internacional puedan responder de manera rápida ante estos fenómenos de cara al futuro.