Niños palestinos en Jan Yunis, en el sur de la Franja de Gaza. - Europa Press/Contacto/Rizek Abdeljawad
MADRID, 7 Ene. (EUROPA PRESS) -
La ONG Save the Children ha denunciado este domingo que, de media, más de diez niños y niñas al día han perdido una o ambas piernas en Gaza desde que estalló el conflicto armado entre Israel y Hamás el pasado 7 de octubre.
En total, en estos tres meses de conflicto, a más de 1.000 niños se les han amputado una o ambas piernas, según el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), y muchas de estas operaciones se han realizado sin anestesia por las deficiencias del sistema sanitario gazatí como consecuencia del conflicto.
"El sufrimiento de los niños y las niñas en este conflicto es inimaginable y más aún porque es innecesario y completamente evitable. Este sufrimiento, el asesinato y la mutilación de niños y niñas son graves violaciones hacia la infancia, y los perpetradores deben rendir cuentas", ha lamentado el director de Save the Children para el Territorio Palestino Ocupado, Jason Lee.
Lee ha subrayado que los niños pequeños atrapados en explosiones son particularmente vulnerables a sufrir lesiones graves que les cambiarán la vida ya que sus huesos no están completamente formados ni sus músculos totalmente desarrollados.
Además, la paralización del sistema de salud y la gran escasez de personal sanitario y de suministros como anestesia y antibióticos han hecho que el personal médico a cargo se vea completamente sobrepasados cuando los niños llegan con heridas de explosión.
"El impacto de ver a niños con tanto dolor y no tener el equipo, los medicamentos para tratarlos o aliviar el dolor es demasiado incluso para los profesionales experimentados. Aunque se trate de una zona de guerra, las imágenes y los sonidos de un niño pequeño mutilado por las bombas no pueden conciliarse y mucho menos entenderse dentro de los límites de la humanidad", ha descrito el director de la ONG.
En esta situación, Save the Children ha reivindicado que sólo un alto el fuego definitivo podrá terminar con las mutilaciones y las muertes de civiles, así como permitir la llegada de la ayuda humanitaria.
"A menos que la comunidad internacional adopte medidas para cumplir con sus responsabilidades en virtud del Derecho Internacional Humanitario y prevenir los crímenes más graves de importancia internacional, la historia nos juzgará a todos y debería juzgarnos a todos. Debemos prestar atención a las lecciones del pasado y debemos evitar que se produzcan crímenes atroces", ha sentenciado Lee.
Según el Ministerio de Salud de Gaza, más de 22.000 palestinos y palestinas han fallecido y otros 57.000 han resultado heridos en los tres meses transcurridos desde el 7 de octubre, con niños y niñas mutilados y asesinados a un ritmo devastador y familias enteras muertas a diario.