MADRID, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -
Cruz Roja Española ha alertado este viernes que cada día unos 1.000 niños y niñas mueren a causa de enfermedades diarreicas prevenibles relacionadas con el agua y el saneamiento, por lo que ha resaltado la importancia de tratar el agua en las comunidades más vulnerables.
Este año el lema del Día Mundial del Agua, que se celebrará el próximo 22 de marzo, es "Aguas residuales, ¿por qué desperdiciar agua?". Naciones Unidas ha querido resaltar con ello la urgente necesidad de que el agua sea tratada y, en la medida de lo posible, reutilizada, para prevenir enfermedades y muertes.
Más de 660 millones de personas no tienen acceso al agua potable. Según la ONU, 1.800 millones de personas utilizan una fuente de agua potable que está contaminada con materia fecal, lo que ocasiona la muerte de millones de personas en el planeta.
Se estima que de media, unos 1.000 niños mueren cada día a causa de enfermedades relacionadas con la falta de saneamiento del agua. Una de las principales causas de esta tragedia es que más del 80 por ciento de las aguas residuales se vierte en ríos o en el mar sin que se eliminen los contaminantes.
Las medidas de Cruz Roja para evitar este tipo de catástrofes humanitarias se centran fundamentalmente en el fomento de un uso responsable del agua, la sensibilización sobre su consumo y la puesta en marcha de proyectos de agua y saneamiento en países en vías de desarrollo. En España, la organización ha llegado a recoger más de 4.200 kilos de basuras en costas, ríos y riberas.
Fuera de nuestro país, Cruz Roja Española lleva a cabo 28 proyectos de agua en 11 países de América, África y Asia que benefician a más de 545.000 personas.