MADRID, 3 Sep. (EUROPA PRESS) -
Al menos 1.570 personas han muerto y casi 6.000 han resultado heridas por las inundaciones y los terremotos que ha sufrido Afganitán en estos últimos dos meses, marcados por desastres naturales en distintos puntos de la región.
Un portavoz talibán, Suhail Shaheen, ha hecho balance de una cadena de desastres que sólo en Afganistán ha causado unos 2.000 millones de dólares en daños. Más de 35.000 viviendas han quedado destruidas en este tiempo, informa la agencia Bloomberg.
El régimen talibán ha solicitado ayuda internacional para hacer frente a la emergencia, que agudiza la crisis de un país donde la mitad de la población tiene graves neceidades alimentarias y apenas hay perspectivas de desarrollo económico.
Los de este verano son los peores desastres que sufre el país desde que al meno 2.000 personas perecieron en 2014 por un corrimiento masivo de tierra en la provincia de Badajshán, en la zona noreste de Afganistán.