BAGDAD, 10 Jul. (Reuters/EP) -
Más de medio millón de menores iraquíes son víctimas del trabajo infantil en Irak, resultado del descenso en los ingresos provocado por la violencia y los millones familias que han tenido que huir de sus hogares, denuncia el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
En concreto, la agencia infantil de la ONU estima que hay más de 575.000 niños y niñas trabajando en lugar de ir a la escuela, el doble que en 1990, justo antes de la guerra de Irak. Desde entonces, el país vive sumido en el conflicto con continuas intervenciones extranjeras.
"Antes iba a la escuela y trabajaba aquí media jornada por poco dinero", ha explicado Alí Husein Judhair, de 12 años. Alí maneja una radial en una cerrajería de Bagdad. "Dejé de ir al colegio para trabajar aquí a tiempo completo y (el dueño) me da un sueldo completo", ha apuntado en declaraciones a Reuters TV.
Solo desde 2014, casi el 10 por ciento de los menores iraquíes, más de 1,5 millones, han tenido que huir de sus hogares con sus familias debido a la violencia. En esa fecha, el Estado Islámico tomó gran parte del noroeste de Irak en una ofensiva relámpago.
Casi una de cada cinco escuelas están cerradas debido al conflicto y casi 3,5 millones de menores en edad escolar no están recibiendo la educación adecuada, apunta UNICEF en un informe del 30 de junio. En total, al menos 3,6 millones de menores de Irak corren riesgo de muerte, heridas graves, violencia sexual, secuestro y reclutamiento en grupos armados, 1,3 millones más en los últimos 18 meses.
"Espero poder volver al colegio y jugar con mis amigos. Me encantaría volver y aprender a leer y escribir. No quiero pasar la vergüenza de decir que no se leer cuando crezca", ha explicado Alí.
Unos 4,7 millones de menores iraquíes necesitan ayuda humanitaria y muchas de sus familias se encuentran en condiciones cada vez peores tras las operaciones militares contra el Estado Islámico, según UNICEF.
"Estoy trabajando y aprendiendo el oficio. Es mejor que el colegio. ¿Qué derechos tienen los que se gradúan? Venden agua en las calles", ha apuntado otro menor, Karrar Yafar, de 14 años, que trabaja en un taller mecánico. "El Gobierno no hace nada. Es mejor aprender un oficio", ha apostillado con las manos aún manchadas de líquido de frenos.