MADRID, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -
La creciente sequía en Somalia amenaza con desplazar a más de un millón de personas en el país africano de cara al mes de abril, según ha advertido este martes la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), en medio del ahondamiento de la crisis humanitaria a causa de la falta de lluvias.
El organismo ha indicado que la sequía en el Cuerno de África ha afectado especialmente a Somalia, lo que llevó al Gobierno a declarar el estado de emergencia en noviembre, en medio de las peores condiciones en 40 años en algunas partes del país.
Así, ha recordado que "el ganado está muriendo y los precios de los alimentos esenciales no son asumibles para la mayoría de la gente", una situación que ha dejado hasta ahora más de 3,2 millones de afectados, incluidas cerca de 245.000 personas que han tenido que abandonar sus hogares, especialmente en el centro y el sur de Somalia.
El organismo ha reseñado que "las condiciones probablemente empeorarán mientras Somalia hace frente al riesgo de una cuarta temporada de lluvias fallida de forma consecutiva entre abril y junio" y ha agregado que las estimaciones apuntan a que la cifra de desplazados durante los próximos seis meses podría ser de entre un millón y 1,4 millones de personas.
Por ello, ha incidido en que las comunidades afectadas, especialmente los desplazados internos --que ascienden a cerca de 2,9 millones en el país africano a causa del conflicto y la crisis humanitaria-- y los migrantes, necesitan ayuda urgente.
"Si actuamos ahora, podemos mitigar nuevos desplazamientos", ha sostenido el coordinador de emergencias de la OIM en Somalia, Mohamed Abdelazim, quien ha hecho hincapié en que "una acción inmediata es clave para salvar vidas y sustentos y evitar mayores necesidades en un futuro".
Históricamente, las sequías han derivado en tensiones en torno al control de zonas de pasto y recursos hídricos, lo que eleva la posibilidad de conflicto, por lo que la OIM trabaja con el Gobierno, socios locales y otras agencias de la ONU para hacer frente a la situación.
Así, el organismo ha manifestado que espera entregar ayuda a 255.000 personas de cara a finales de marzo, si bien ha resaltado que son necesarios más fondos para expandir sus operaciones ante la posibilidad de desplazamientos de población hacia centros urbanos.
"Estamos centrados en dar asistencia a comunidades donde residen o en localidades pequeñas cerca de su lugar de origen, mientras aumentamos de forma simultánea las actividades de preparación en grandes centros urbanos", ha explicado Abdelazim.
"Un mayor desplazamiento hacia grandes ciudades sobrepasará los servicios fundamentales como la sanidad, llevando a brotes de enfermedades y otras grandes preocupaciones relativas a la falta de servicios", ha alertado.
Las autoridades de Somalia anunciaron el 11 de enero el envío de ayuda humanitaria por vía aérea a varias regiones del centro y el sur del país afectadas por la sequía, mientras que el Plan de Respuesta Humanitaria para Somalia busca recaudar 1.500 millones de dólares (cerca de 1.320 millones de euros) para dar ayuda a 5,5 millones de personas en el país.
La Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) destacó en diciembre que 7,7 millones de personas necesitan ayuda humanitaria en el país y cifró en 2,9 millones el total de desplazados. Asimismo, dijo que las proyecciones apuntan a que 1,2 millones de niños sufrirán desnutrición aguda este año.