MADRID, 10 Abr. (EUROPA PRESS) -
Más de la mitad de las familias iraquíes se encuentran en riesgo de inseguridad alimentaria y no pueden asumir más golpes como un aumento de los precios de los alimentos básicos o la violencia, según han alertado este lunes en un informe conjunto el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y el Gobierno de Irak.
"El análisis completo sobre seguridad alimentaria y vulnerabilidad debería guiar el trabajo del Gobierno, políticos y trabajadores humanitarios en el país para mejorar el estado de seguridad alimentaria y nutricional de todos los iraquíes para no dejar a nadie atrás", ha sostenido la representante del PMA en Irak, Sally Haydock.
El informe es uno de los estudios técnicos más detallados sobre seguridad alimentaria jamás realizados en Irak y se llevó a cabo antes de la actual ofensiva sobre la ciudad de Mosul, en manos del grupo terrorista Estado Islámico desde junio de 2014, que ha provocado cientos de miles de desplazados.
El estudio muestra que el 2,5 por ciento de los iraquíes ya se encuentra en situación de inseguridad alimentaria y por tanto necesitan apoyo. Además, pone de manifiesto que casi el 75 por ciento de los niños menores de 15 años de Irak, en lugar de ir al colegio, está trabajando para ayudar a sus familias a tener comida en la mesa.
Para elaborar el informe, se ha entrevistado a más de 20.000 familias en zonas urbanas y rurales, incluidos desplazados internos, durante entrevistas que finalizaron en 2016.
Según el resultado, el 53 por ciento de los residentes y el 66 por ciento de los desplazados internos son vulnerables a la inseguridad alimentaria. La concentración más alta de familias en situación de inseguridad alimentaria se encuentra en la zona sur del país, en el norte de Muthanna en concreto, y en partes de Saladino.
Así las cosas, el informe recomienda aumentar la concienciación sobre nutrición, el acceso a la educación (especialmente de las niñas), redes de seguridad social y medios de subsistencia en zonas rurales, para conseguir el Objetivo de Desarrollo Sostenible hambre cero y proporcionar las bases para un plan estratégico de desarrollo de entre cinco y diez años.
Desde junio de 2014, más de 3 millones de iraquíes han sido desplazados debido al conflicto. En coordinación con el Gobierno, el PMA proporciona cada mes asistencia alimentaria a 1,5 millones de las personas desplazadas más vulnerables en las 18 provincias mediante programas de asistencia en efectivo y raciones familiares mensuales.
Para poder llevar a cabo su labor, el PMA necesita urgentemente 113 millones de dólares para proporcionar raciones completas de comida mensuales y asistencia en efectivo para cubrir las necesidades de 1,5 millones de iraquíes vulnerables hasta finales de septiembre de 2017.