CARACAS, 31 Jul. (EUROPA PRESS) - Más de ocho millones de personas han participado en las elecciones a la Asamblea Constituyente que se han celebrado este domingo en Venezuela, según datos del Consejo Nacional Electoral (CNE) que han sido interpretados como una "victoria" por el presidente del país, Nicolás Maduro, a pesar de que la votación ha transcurrido en medio de nuevos enfrentamientos que han dejado al menos diez muertos. Unos 19,4 millones de venezolanos estaban llamados a las urnas para elegir a 537 de los 545 miembros que conforman la Asamblea Constituyente con el mandato de redactar una nueva Carta Magna que devuelva la paz social a Venezuela, tras una nueva ola de violencia que ha dejado más de cien muertos y miles de detenidos desde el pasado mes de abril, cuando comenzaron las protestas contra Maduro por su injerencia en los demás poderes del Estado. La clave de estos comicios era la participación, ya que la Mesa de Unidad Democrática (MUD) --coalición opositora-- no ha presentado candidatos con la intención de boicotear un proceso electoral que considera un "fraude". Así, los más de 6.000 aspirantes a conseguir un escaño en la Asamblea Constituyente procedían en su totalidad de las filas 'chavistas'. La presidenta del CNE, Tibisay Lucena, ha comparecido en rueda de prensa para anunciar que la participación se ha situado en el 41,5 por ciento, lo que equivale a 8.089.320 votos, una cifra muy por encima de lo esperado que, de hecho, obligó a las autoridades electorales a prorrogar el horario de funcionamiento de los centros de votación. Estos datos han mejorado la afluencia a las urnas del pasado 16 de julio, cuando la MUD celebró un referéndum para que los venezolanos expresaran su rechazo a la Asamblea Constituyente. Entonces, la oposición estimó en 7,2 millones los participantes, por debajo del pico de 7,7 millones que alcanzó la alianza disidente en las elecciones parlamentarias de 2015. La participación habría mejorado incluso el récord personal de Maduro, que en las elecciones presidenciales de 2013 fue elegido con 7,5 millones de votos. "Es la votación más grande que haya sacado la Revolución (Bolivariana) en toda la historia electoral. El que tenga ojos que vea y el que tenga oídos que oiga", ha destacado desde la Plaza Bolívar de Caracas. Maduro ha subrayado que el 'chavismo' ha obtenido "ocho millones largos de votos en medio de las amenazas" de sus vecinos regionales. "El pueblo bravío ha dado una lección de coraje, de valentía. Lo que hemos visto hoy es admirable", ha enfatizado, en declaraciones recogidas por la prensa venezolana. En la misma línea, Lucena ha considerado que, si bien "ha sido una elección extraordinaria, inusual, distinta", "el balance es extremadamente positivo, porque ganó la paz, ganó Venezuela". "A pesar de la violencia, a pesar de las amenazas, los venezolanos pudieron expresarse", ha valorado. La MUD, por su parte, ha rechazado los datos ofrecidos por el CNE. El diputado opositor Henry Ramos Allup ha asegurado en un vídeo difundido por Facebook que la abstención se ha situado en el 88 por ciento, por lo que solamente habrían participado 2,48 millones de venezolanos. Además, la coalición opositora ha denunciado la violencia que ha marcado la jornada electoral. De acuerdo con los cálculos de la MUD, un total de 16 personas han muerto. Sin embargo, el Ministerio Público solo ha confirmado diez fallecidos y el oficialismo ha negado que se hayan producido víctimas mortales. La ONG Foro Penal estima que en torno a un centenar de personas han sido detenidos por los disturbios de las últimas horas. La MUD continuó el domingo con su agenda de protestas. En Caracas, sus simpatizantes protagonizaron una marcha sobre la autopista Francisco Fajardo y levantaron barricadas incendiadas para impedir el acceso a los centros de votación, lo que suscitó la respuesta de las fuerzas de seguridad dando lugar a nuevos choques. Ya de madrugada, una vez cerrados los colegios electorales, la violencia ha continuado por la intervención de los llamados 'colectivos', grupos de civiles armados que la MUD vincula al 'chavismo', que se han enfrentado a los opositores que seguían en las calles. El gobernador de Miranda, Henrique Capriles, ha avanzado que este lunes retomarán "la lucha". "Mañana a partir del mediodía habrá una jornada de protesta en todo el país contra la masacre que ocurrió este domingo" y a las 17.00 (hora local) comenzarán los actos conmemorativos por las víctimas de este 30 de julio, ha detallado. El regidor estatal también ha instado a los seguidores de la MUD a movilizarse hacia Caracas para participar en "la manifestación más grande, que se realizará el día de la instalación de la Asamblea Constituyente", algo previsto para esta misma semana, de acuerdo con Maduro. Maduro pretende comparecer ante la Asamblea Constituyente en cuando empiece su andadura "para reconocer su poder plenipotenciario originario y ponerme a su servicio y orden". "Nadie está por encima del poder originario", ha recalcado el inquilino del Palacio de Miraflores. De los 545 miembros que la componen, este domingo solo se han elegido 537. Aún quedan los ocho representantes indígenas, que saldrán de las "asambleas generales" que se celebrarán el 1 de agosto en tres regiones de Venezuela --Sur, Oriente y Occidente-- conforme "a sus tradiciones y costumbres ancestrales". Entre los nombres que han sido elegidos este domingo destacan la primera dama, Cilia Flores; el primer vicepresidente del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello; la ex ministra de Relaciones Exteriores Delcy Rodríguez; y la ex ministra de Asuntos Penitenciarios, Iris Varela. En este contexto, Maduro ha vuelto a proponer un "diálogo nacional", aunque en el marco de la Asamblea Constituyente, y ha revelado que en las últimas semanas el Gobierno ha intensificado los contactos con la MUD para que participara en las elecciones del 30 de julio y que incluso ofreció retrasarlas 15 días para que presentaran candidatos. "Yo le hago un reto a la MUD: abandonen el camino de la violencia, vuelvan a la política, acepten y vamos a medirnos en las gobernaciones para ver quién puede más", ha propuesto, aunque ha matizado que "depende de si se sientan en la mesa de negociaciones". "Si no se sientan (...) otro gallo cantaría", ha alertado. El presidente venezolano pretende que la coalición opositora participe en la Comisión de Verdad y Justicia que se creará en la Asamblea Constituyente y que se dedicará a investigar los hechos de violencia de los últimos cuatro meses. Para dirigirla ha propuesto a la ex canciller Delcy Rodríguez. Al margen de este grupo de trabajo, ha anticipado que una de las primeras tareas de la Asamblea Constituyente será llevar a cabo una "reestructuración" del Ministerio Público para "rescatar" la institución. "Solo a través de la Justicia lograremos la paz para construir estabilidad política y brindar seguridad", ha esgrimido. La Fiscalía General está en manos de Luisa Ortega Díaz que, tras años como leal 'chavista', se ha desmarcado del Gobierno de Maduro por violaciones de los Derechos Humanos que ha llegado a calificar de "terrorismo de Estado" y por una Asamblea Constituyente que considera "inconstitucional" y ha prometido combatir.