Tusk cree que es un "enorme reto" pero ve "posible" un acuerdo en diciembre sobre las bases del divorcio
BRUSELAS, 24 Nov. (EUROPA PRESS) -
La primera ministra británica, Theresa May, ha insistido este viernes en que las negociaciones para pactar la salida de Reino Unido de la Unión Europea avanzan, a pesar de que queden "problemas" sobre la mesa que deben ser aún "resueltos".
"Aún hay problemas sobre distintas cuestiones que estamos negociando que deben ser resueltos", ha declarado May a la prensa en Bruselas, tras reunirse en bilateral con varios líderes europeos, como el presidente del Consejo, Donald Tusk, la canciller alemana, Angela Merkel, o el primer ministro belga, Charles Michel.
"Ha habido una atmósfera muy positiva en las conversaciones y un sentimiento genuino de que queremos avanzar juntos", ha afirmado May tras sus encuentros.
La 'premier' ha aprovechado los márgenes de una cumbre con países del este para abordar las negociaciones del Brexit con algunos de sus aún socios en la UE, cuyos líderes decidirán en la cumbre de los días 14 y 15 de diciembre si se hay un acuerdo suficiente sobre las bases del divorcio y se puede empezar a hablar del futuro de las relaciones.
El bloque comunitario ha puesto como condición para abrir la segunda fase que haya un acuerdo de principio en tres prioridades: derechos de los ciudadanos comunitarios en Reino Unido, frontera irlandesa y factura que deberá asumir Londres a su salida de la UE.
El Gobierno británico, sin embargo, insiste en que esa factura, principal escollo en las negociaciones, está ligada a las conversaciones sobre el futuro y que hay que avanzar en ambos campos.
May no ha querido, sin embargo, si tal y como se ha especulado en los últimos días estaría dispuesta a elevar de 20.000 a 40.000 millones de euros la oferta británica para cumplir con sus compromisos presupuestarios con la UE, una cuenta que en Bruselas estiman más elevada, al menos de 60.000 millones de euros.
"Hemos hablado de cómo podemos avanzar en el problema del acuerdo financiero (...). He dicho que honraremos nuestros compromisos, que ningún país de la UE, ningún Estado miembro debe preocuparse de tener que recibir menos o pagar más en el actual plan presupuestario", ha zanjado la primera ministra británica, para no ofrecer una cifra concreta.
Otra de las claves para que la UE abra la puerta a la siguiente fase en diciembre es resolver la situación de la frontera entre Irlanda del Norte e Irlanda, después de que el ministro de Exteriores irlandés, Simon Coveney, sugiriera que Dublín vetará el paso a la segunda etapa si no hay "más claridad y credibilidad" por parte de Londres en cuanto a que no se reinstaurará una frontera "dura" en la zona.
May ha dicho al respecto que el Gobierno irlandés y el británico están en conversaciones continuas para buscar "soluciones" a este asunto y que ambas parten comparten "el mismo deseo" de que el paso de personas y mercancías siga desarrollándose tras el Brexit con normalidad, como ahora.
"No queremos crear ninguna barrera nueva al comercio o al movimiento de las personas a través de esa frontera", ha continuado.
TUSK VE POSIBLE EL ACUERDO
El presidente del Consejo europeo, Donald Tusk, ha asegurado, por su parte, que cree que es "posible" lograr un acuerdo con Reino Unido antes de la cumbre de diciembre sobre las bases del divorcio, si bien ha avisado de que es un "reto enorme".
"Es posible (lograr) los progresos suficientes en las negociaciones del Brexit para la cumbre de diciembre. Pero es un reto enorme", ha indicado Tusk en un mensaje difundido a través de su cuenta oficial de Twitter.
Para ello, ha añadido, es necesario que el bloque de los 27 vea avances de parte de Londres "en los próximos diez día", incluido en lo que a la situación de la frontera irlandesa se refiere.
La decisión definitiva la tomarán en la cumbre que les reunirá en Bruselas los días 14 y 15 de diciembre, si bien Tusk ya ha avisado que para que ellos sea posible es necesario que Londres dé pasos definitivos "a principios de diciembre".