Se reanuda el transporte público dentro de una misma provincia y se controlará el aforo de bares y restaurantes
MADRID, 18 Jun. (EUROPA PRESS) -
La mayor parte de Cuba, a excepción de las regiones de La Habana y Matanzas, han iniciado este jueves la primera fase dentro del calendario de desescalada establecido por el Gobierno de Miguel-Díaz Canel, que no contempla la reactivación del turismo internacional hasta una etapa posterior cuya fecha aún está por concretar.
El Ministerio de Salud cubano tiene registrados 2.280 positivos por la pandemia del nuevo coronavirus, después de confirmar el miércoles siete nuevos casos, todos ellos en la provincia de La Habana. La cifra de fallecidos se mantiene en 84 tras una semana sin nuevas víctimas.
En aras de recuperar la normalidad perdida, el Ejecutivo ha elaborado un plan por fases para reanudar actividades durante los próximos meses, bajo recomendaciones de seguir guardando las distancias y adoptar medidas de protección, en particular el uso de mascarillas.
Los restaurantes y las cafeterías podrán reabrir con un aforo máximo del 50 por ciento y una separación mínima entre mesas de 1,5 metros, potenciando el envío a domicilio y la recogida de comida para llevar. Los bares no podrán habilitar pistas de baile para evitar concentración de personas, según la prensa oficial.
La ministra de Comercio Interior, Betsy Díaz Velázquez, ha abogado de hecho durante una mesa redonda por "potenciar la incorporación del mensajero y vendedor a domicilio en toda la actividad de comercio", al tiempo que ha abogado por trabajar para que el primer día de cada mes estén disponibles los productos incluidos dentro de la cesta básica, con restricciones para determinados bienes.
TRANSPORTE Y TURISMO
Aunque con limitaciones, se reanuda el transporte público dentro de una misma provincia, con la obligatoriedad del uso de mascarillas para pasajeros y trabajadores. En una segunda fase se restablecerá la movilidad interprovincial y en una tercera se añadirán los vuelos internacionales hacia puntos turísticos, ha explicado el responsable de Transporte, Eduardo Rodríguez Dávila.
La entrada del turismo extranjero se limitará inicialmente a los focos considerados más atractivos y llevará aparejada pruebas PCR a la entrada y, en un principio, restricciones de movimiento, de tal forma que los turistas no puedan abandonar la zona donde se encuentren alojados. Los hoteles dispondrán de vigilancia médica y de protocolos para el aislamiento de posibles casos.