Bombardeos israelíes en el campamento de refugiados de Nuseirat, en el centro de la Franja de Gaza, en una operación en la que rescataron a cuatro rehenes y mataron a 270 personas - Europa Press/Contacto/Marwan Daoud
Alerta del "peligro" que supone el uso de estos vehículos y señala que se trata de un crimen de guerra contra civiles
MADRID, 11 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Media Luna Roja ha denunciado este lunes el uso de vehículos humanitarios por parte de Israel para llevar a cabo operaciones militares, después de que supuestamente fuerzas especiales israelíes utilizaran esta estrategia para infiltrarse en el campo de refugiados de Nuseirat, en la Franja de Gaza, donde rescataron a cuatro rehenes en una operación que dejó 270 muertos y más de 700 heridos.
"Alertamos del peligro que supone el uso de un camión de ayuda humanitaria como cobertura de operaciones militares", ha señalado la organización al tiempo que ha agregado que "estas acciones se producen en un momento en que la gente que vive en Gaza necesita ayuda desesperadamente, en medio de una grave inseguridad alimentaria y una preocupación constante por la hambruna".
En este sentido, ha indicado que "las acciones de Israel son preocupantes por varias razones", como "utilizar una fuente confiable para las personas atrapadas en el conflicto, lo que constituye una violación del Derecho Internacional Humanitario y consuetudinario, que prohíbe el delito de perfidia".
"Ocultar fuerzas militares dentro de un camión de ayuda se considera un crimen de guerra contra civiles. Las fuerzas de ocupación engañaron a la gente pretendiendo estar dando ayuda", ha denunciado a través de su perfil en la red social X.
Por otro lado, ha asegurado que "la segunda razón" es que esta acción "destruye la confianza de la población civil en quienes entregan ayuda", lo que "vuelve a poner en riesgo a los trabajadores de ayuda humanitaria y de atención sanitaria".
Las autoridades de Israel desmintieron categóricamente estas informaciones, denunciadas en un primer momento por fuentes locales. Por su parte, la relatora de la ONU para Palestina, Francesa Albanese, señaló que las fuerzas de rescate emplearon "con intención pérfida" falsos vehículos de asistencia para infiltrarse en lo que describió como una maniobra de "camuflaje humanitario a otro nivel".
Albanese acusó a Israel de emplear a los rehenes como excusa para "legitimar el asesinato, la mutilación y la muerte por inanición de los palestinos de Gaza" y aseguró que "Israel podría haber conseguido la liberación de estos rehenes durante el primer alto el fuego, hace ocho meses".
En esta misma operación, se denunció la utilización del muelle provisional construido por Estados Unidos en la costa de Gaza como parte de la operación israelí, extremo también negado por las autoridades estadounidenses, que matizaron que los rehenes, ya liberados, fueron extraídos del enclave no a través de esta instalación, sino de "una zona al sur" de la estructura "y cualquier afirmación sobre lo contrario es falsa".