MADRID, 10 Ene. (EUROPA PRESS) -
Al menos medio centenar de militares de la junta que gobierna Birmania desde el golpe de Estado de 2021 han muerto en enfrentamientos registrados durante los últimos días con los rebeldes birmanos varios puntos del país.
A pesar de los intensos ataques y bombardeos del Ejército, la junta ha perdido esta semana varias bases militares de importancia estratégica en el estado de Rajine, en el oeste del país, después de que las tropas que quedaban en la zona se hayan retirado ante el avance de los grupos rebeldes.
Los enfrentamientos se han concentrado en el estado de Shan y las regiones de Mandalay, Sagaing y Bago. Desde el martes se han registraron combates en la ciudad de Mrauk U, donde al menos tres civiles fueron detenidos por las fuerzas de seguridad en un intento por utilizarlos como escudos humanos, según han explicado fuentes de los grupos rebeldes al portal de noticias The Irrawaddy.
De forma paralela, se han producido enfrentamientos en el municipio de Nawghkio, en el norte del estado de Shan, donde el Ejército de Liberación Nacional Taang (TNLA) ha atacado a los militares en la localidad de Kyaukme Lay. El Ejército, por su parte, ha hecho uso de aviones de combate y helicópteros para hacer frente a la resistencia.
Los enfrentamientos registrados recientemente en el país asiático suponen el mayor desafío militar para la junta desde que llegó al poder en 2021, especialmente ahora que varios grupos rebeldes han unido sus fuerzas para hacer frente al Ejército en el marco de la llamada 'Operación 1027'.
Esta alianza ha permitido a los rebeldes hacerse con más de 300 puestos de control del Ejército y más de una decena de localidades en todo el país, además de varias rutas comerciales entre China y Birmania, especialmente en el estado de Shan, en el noreste.