KABUL 28 Jun. (Reuters/EP) -
La violencia y la intimidación contra los periodistas en Afganistán ha aumentado este mes de junio, con la mayor parte de los ataques protagonizados por las fuerzas de seguridad estatales, según han denunciado este martes los medios de comunicación.
Las denuncias por acoso, intimidación y violencia ante la Asociación de Periodistas Independientes Afganos (AIJA) y el Club de la Prensa de Kabul han aumentado recientemente de forma considerable. El fotoperiodista David Gilkey y su compañero afgano Zabihulá Tamana, que trabajaban para la radio estadounidense NPR, han muerto este mes en la provincia de Helmand, dos años después de que un estudio de radio fuera destruido por las fuerzas talibán en la provincia de Nangarhar.
Además, este mes se han registrado unos 22 casos, el doble respecto a los registrados mensualmente durante los últimos siete años. De esos ataques, quince han sido llevados a cabo por las fuerzas de seguridad, cuatro a manos de los talibán y otros tres han sido reivindicados por grupos armados, según ha explicado el presidente de la AIJA, Rahimulá Samander.
"Pedimos al Gobierno, a los grupos armados y a todos aquellos que se encuentren involucrados en la lucha que allanen el camino para que los periodistas puedan hacer su trabajo", ha aseverado Samander. La preocupación a nivel internacional ha aumentado después de que los talibán matasen en enero a siete periodistas de la principal cadena de televisión afgana.
No obstante, los casos de maltrato vividos por muchos periodistas en Afganistán no son provocados por los talibán sino por las fuerzas de seguridad del país. "En algunos casos, las fuerzas de seguridad, especialmente la Policía, no saben cómo deben comportarse con los periodistas", ha aseverado Samander, que ha añadido que la violencia se concentra principalmente en Kabul y en las provincias de Zabil, en el sur, Daikundi, en el centro del país, y Logar, en el este.