MOSCÚ, 1 Nov. (Reuters/EP) -
Estados Unidos tiene ante sí una tarea complicada de solventar el daño causado por las revelaciones de que ha espiado, de forma "cínica", a dirigentes de países aliados, ha considerado el primer ministro ruso, Dimitri Medvedev.
"No es muy agradable cuando a uno le espían (...) así que los líderes están enfadados y yo les entiendo", ha declarado Medvedev en una entrevista concedida a Reuters, en referencia al espionaje al que la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) estadounidense habría sometido a la canciller alemana, Angela Merkel, entre otros dirigentes.
El primer ministro ha sugerido que este tipo de espionaje no es inusual, pero ha considerado que "se asume que no se hace de una forma tan absolutamente cínica".
"¿Se puede calmar la situación? Creo que es posible, pero para ser sincero, aquí no ayudará ninguna garantía", ha opinado. "¿Qué se puede decir en esta situación? ¿'Lo siento, no lo haremos más' o 'no intentaremos escucharte'? Nadie lo creería", ha considerado Medvedev.