BANGKOK 22 Ago. (Reuters/EP) -
El jefe de la Policía Nacional de Tailandia, Jakthip Chaijinda, ha informado este lunes de que al menos 20 personas están involucradas en la cadena de atentados que tuvo lugar el 11 de agosto en varias provincias del país, donde murieron cuatro personas y decenas resultaron heridas.
Las fuerzas de seguridad han manifestado que la mayoría de atacantes provenían de las provincias musulmanas del sur de Tailandia. "Sabemos de dónde son y adónde fueron. Creemos que al menos una veintena de personas están involucradas en los ataques", ha indicado Jakthip.
Las explosiones tuvieron lugar varios días después de que se celebrara el referéndum sobre la reforma de la Constitución, cuyo resultado da vía libre a la junta militar para aumentar las medidas políticas castrenses en el país.
"No podemos decir si el motivo está o no relacionado con el referéndum, con la insurgencia. Tampoco si fueron contratados", ha señalado Jakthip. La semana pasada, el ministro de Defensa, Prawit Wongsuwan, aseveró que no se trataba "de una extensión" de la insurgencia establecida en la frontera con Malasia.
Varios analistas han señalado que la posición de las autoridades frente a la autoría de los ataques resulta predecible, y que establecer a los insurgentes musulmanes malayos como los principales autores de las explosiones conllevaría problemas económicos y políticos.
Un tribunal militar de Tailandia emitió una orden de arresto contra un hombre por haber planeado la detonación de un explosivo en una de las playas más turísticas de la isla de Phuket. El sospechoso fue identificado como Ahama Lengha, de la provincia de Narathiwat, de mayoría musulmana.