MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
Al menos 22 personas han muerto y 36 más han resultado heridas en los combates registrados en las últimas horas en la localidad de Bria, en el este de República Centroafricana, donde se enfrentan milicias de mayoría musulmana y fuerzas irregulares cristianas.
La Misión Multidimensional Integrada de Estabilización de Naciones Unidas en República Centroafricana (MINUSCA) ha informado de esta violencia y ha señalado que entre las víctimas mortales hay al menos 17 civiles. Además, ha asegurado que unas 10.000 personas han huido de la zona debido a la violencia, con lo que ya son 20.000 los desplazados en esta ciudad.
"Los combates entre grupos armados en Bria y en otros lugares del este de República Centroafricana deben parar", ha afirmado la 'número dos' de la MINUSCA, Diane Corner. "Estos desoladores actos de violencia perpetrados por grupos armados en la última semana han acabado con la vida de decenas de hombres, mujeres y niños centroafricanos inocentes y han privado a las familias de sus hogares y su sustento", ha añadido.
Corner ha explicado que la violencia está impidiendo además la distribución de la ayuda humanitaria "tan necesaria" y por ello ha pedido a los grupos armados que "cesen las hostilidades de forma inmediata e incondicional" y abran un diálogo pacífico. "Estamos trabajando activamente con la sociedad civil, con los líderes políticos y religiosos, para reducir las tensiones", ha asegurado Corner, que ha pedido "a todas las comunidades que busquen soluciones constructivas en pro de una paz y estabilidad duraderas".
Las facciones rivales se disputan el aeródromo de Bria desde el viernes. Los saqueos y ataques han obligado a los cooperantes presentes en la ciudad a refugiarse dentro de la base que tiene allí la MINUSCA, en torno a la que se arremolinan unos 15.000 desplazados.
La misión de la ONU ha reforzado sus contingentes en las ciudades de Bangassou y Alindao tras la violencia de la pasada semana. Solo el miércoles fueron recuperados 115 cadáveres en Bangassou, según informó Cruz Roja, y el viernes se informó de 39 muertos en Bria.
República Centroafricana lleva sumida en un conflicto interreligioso desde 2013, cuando los antiguos rebeldes de Séléka, principalmente musulmanes, se hicieron con el poder y depusieron al entonces presidente Francois Bozizé, provocando la aparición de milicias 'antibalaka' de mayoría cristiana que actuaron en represalia.
Actualmente, en el país hay más de 400.000 desplazados internos y 2,2 millones de personas, casi la mitad de la población, necesitan ayuda humanitaria, según la ONU.