MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
El balance de civiles muertos en el bombardeo ejecutado presuntamente por la coalición que encabeza Arabia Saudí contra un mercado en la localidad yemení de Sahar, en la provincia de Saada (norte), ha aumentado a 29, según ha informado la cadena de televisión qatarí Al Yazira.
Residentes locales han indicado que el bombardeo ha afectado al mercado de Alaf, hiriendo además a nueve personas y dejando siete desaparecidos entre los escombros.
La cadena de televisión local Al Masirah TV, controlada por los rebeldes huthis, ha confirmado el balance de muertos. La coalición que lidera Riad no se ha pronunciado por el momento.
Asimismo, un residente citado por Al Yazira ha asegurado que no había milicianos en el lugar en el momento del ataque. "El bombardeo ha arrasado totalmente el mercado", ha detallado.
"Debido a los repetidos bombardeos y disparos de morteros desde la frontera saudí, muchos trabajadores yemeníes duermen en sus tiendas, ya que es muy peligroso estar en las carreteras por la noche", ha explicado.
Por su parte, la portavoz del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en Yemen, Shabia Mantoo, ha expresado su "profunda tristeza" por las informaciones, afirmando que la ONU "está verificando el incidente".
"Durante el prolongado conflicto en Yemen vemos como se intensifican las hostilidades, se acumulan las necesidades humanitarias y los civiles sufren la carga", ha indicado, en declaraciones a la citada cadena qatarí.
La coalición militar que lidera Arabia Saudí es la responsable de la mayoría de los ataques aéreos que se producen en Yemen, tal y como ha señalado recientemente la ONU en varios informes que destacan, en concreto, las víctimas infantiles que han dejado los mismos.
El conflicto entre el Gobierno de Abdo Rabbu Mansur Hadi, apoyado por la coalición liderada por Arabia Saudí, y los huthis, que cuentan con el respaldo de Irán y junto a los que combaten las tropas leales al expresidente Alí Abdulá Salé, estalló hace más de dos años y ha causado estragos en el país más pobre del mundo árabe.
El hundimiento de los servicios básicos y la infraestructura sanitaria del país ha derivado además en un brote de cólera que ha dejado más de 2.100 muertos desde abril.
El enviado especial de la ONU para Yemen, Ismail Uld Cheij Ahmed, afirmó a principios de octubre que las partes en conflicto "no tienen interés" en lograr una solución, recalcando que "no hay ganadores en el campo de batalla".
"La gente (en Yemen) es cada vez más pobre, mientras que los líderes influyentes son cada vez más ricos. No están interesados en encontrar soluciones, ya que perderían poder y control con un acuerdo", explicó.
Así, recalcó que "los perdedores son los ciudadanos yemeníes que sufren esta guerra", al tiempo que destacó que un acuerdo para el acceso de la ayuda humanitaria al país no puede reemplazar una solución que implique un acuerdo de paz.
Apenas unas semanas antes, Hadi resaltó que "la solución militar es la más probable" para el conflicto en el país asiático, acusando a los huthis de obstruir los esfuerzos para lograr la paz.
"La solución militar es la más probable para la crisis en Yemen, dada la intransigencia de los huthis y las milicias golpistas de Salé, que siguen recibiendo órdenes de Irán", dijo, en una entrevista concedida a la cadena de televisión saudí Al Arabiya.
"Pese a ello, el Gobierno legítimo sigue extendiendo su mano para la paz, porque es responsable del pueblo yemení y de ponerle fin al sufrimiento que padece", remachó.