Al menos 26 qataríes secuestrados en el desierto iraquí cerca de Arabia Saudí

BAGDAD, 16 Dic. (Reuters/EP) -  

Al menos 26 ciudadanos qataríes han sido secuestrados por hombres armados desconocidos de su campamento de caza en una zona desértica próxima a la frontera con Arabia Saudí a primera hora de este miércoles, según han informado el gobernador regional y responsables policiales.

Dos oficiales de Policía en Samawa han confirmado el secuestro y han dicho que las fuerzas de seguridad ya han lanzado una operación de búsqueda a gran escala.

"Un grupo armado a bordo de decenas de vehículos pick-up ha secuestrado a al menos 26 cazadores qataríes de su campamento en la zona de Busaya, en el desierto de Samawa cerca de la frontera saudí", ha explicado el gobernador de Samawa, Falih al Zayady.

Cazadores de varios países del Golfo viajan a menudo a la zona en esta época del año para cazar. Según un coronel de la Policía en Samawa, los cazadores iban escoltados por efectivos de seguridad iraquíes pero decidieron no intervenir por el alto número de milicianos.

"Estamos hablando de al menos 100 hombres armados con armas ligeras y medias que irrumpieron en el campamento qatarí y secuestraron a los cazadores hacia las 3:00 horas del miércoles", ha explicado el coronel, que ha pedido no ser identificado.

Por el momento, ningún grupo ha reivindicado la autoría del secuestro. Los milicianos del grupo terrorista Estado Islámico a menudo viajan en gran número en convoyes.

Otro oficial de Policía ha indicado que la información inicial sugiere que los secuestradores han conseguido huir con los rehenes hacia una zona desértica cerca de la provincia sureña de Nassiriya, 300 kilómetros al sur de Bagdad.

El Ministerio de Exteriores qatarí ha confirmado que un grupo de sus ciudadanos han sido secuestrados en Irak mientras realizaban un viaje de caza, si bien no ha especificado cuántos. En un comunicado, ha precisado que trabaja con el Gobierno iraquí para garantizar su liberación "lo antes posible".

Según el Ministerio, los cazadores habían entrado en territorio iraquí con un permiso del Ministerio del Interior de este país.