BANGUI, 13 Nov. (Reuters/EP) -
Al menos 30 personas han muerto en una serie de ataques que se han producido esta semana en República Centroafricana, siguiendo así con una ola de violencia que amenaza la visita del Papa, prevista para el próximo 28 de noviembre.
En un ataque perpetrado el lunes por la noche en la localidad de Ndassima, hombres armados cortaron las gargantas a una decena de personas. "Vinieron desde dos lugares, unos de Bambari y otros de Mbres", ha detallado.
Aunque la radio nacional ha identificado a los atacantes como miembro de la etnia peul, el regidor local Yves Mbetigaza ha afirmado que eran milicianos de la alianza islamista Séléka.
Además, en la cercana localidad de Mala, los habitantes han asegurado que hombres armados secuestraron a ocho vecinos mientras que decenas siguen desaparecidos.
A ello se suma otro ataque en la ciudad de Bandambou, donde seis cazadores aparecieron muertos el jueves.
Estos sucesos han elevado a 30 el número de personas que han fallecido a lo largo de esta semana en ataques de grupos armados en la nación africana.
Las fuerzas centroafricanas, apoyadas por los 'cascos azules' y las tropas francesas, se centran en asegurar la capital, Bangui, para que la visita del Papa sea posible. Sin embargo, el Vaticano ya ha adelantado que, si la situación empeora, podría cancelar el viaje.
"Ya hemos informado al Vaticano de que la visita del Papa conlleva riesgos para él y para cientos de miles de creyentes que irán a verle en un periodo preelectoral", ha dicho una fuente del Ministerio de Defensa francés.
El país se prepara para ir a las urnas el 27 de diciembre en unas elecciones generales con las que espera poner fin a la crisis política que comenzó en 2013 con el golpe de Estado de Séléka y que se ha prolongado por los ataques de odio entre musulmanes y cristianos.