MADRID, 11 Oct. (EUROPA PRESS) -
Entre 30 y 35 miembros del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) han muerto este domingo en bombardeos de las Fuerzas Aéreas turcas sobre el norte de Irak y otros 14 han muerto en territorio turco a pesar del alto el fuego anunciado el sábado por la organización separatista, según recoge la prensa turca.
En concreto, han destruido posiciones del PKK en las regiones de Metina y Zap en Irak y en el distrito de Lice, en la provincia turca del Diyarbakir.
Desde el Gobierno, el viceprimer ministro Yalçin Akdogan ha rechazado el alto el fuego, que considera una "táctica" antes de las elecciones. Además, ha reiterado la exigencia de Ankara: que entreguen las armas y se marchen de Turquía.
Por otra parte, las autoridades turcas han informado de la muerte de dos militares en la provincia de Ardahan (este) en operaciones contra el PKK. Efectivos de la Gendarmería turca se enfrentaron con milicianos separatistas en la región de Senkaya, informa el diario 'Hurriyet'.
El Gobierno turco inició en 2012 conversaciones de paz con el líder del PKK, Abdulá Ocalan, que está encarcelado en una isla próxima a Estambul, en un intento por acabar con tres décadas de lucha armada que han dejado unos 40.000 muertos y han lastrado el desarrollo del sureste del país, predominantemente kurdo.
El PKK, considerado organización terrorista por Turquía, Estados Unidos y la UE, declaró a continuación un alto el fuego y comenzó a retirarse de Turquía hacia sus campamentos en el norte de Irak, donde tienen sus bases sus milicianos. En julio el alto el fuego se rompió totalmente y el Ejército turco ha bombardeado las posiciones del PKK en el norte de Irak.