RABAT 11 Jun. (Reuters/EP) -
Al menos el 54,4 por ciento de las mujeres en Marruecos, que representan millones en un país con una población de alrededor de 35 millones de personas, ha sido víctimas de violencia alguna vez en su vida, según un estudio publicado en mayo por el Ministerio de Solidaridad, Familia y Desarrollo Social.
Según el estudio, las mujeres entre 25 y 29 años son las más vulnerables y solo el 28,2 por ciento de las mujeres maltratadas han hablado con una persona o una institución sobre su situación y solo el 6,6 por ciento han llevado su caso ante la Justicia.
Con imágenes de cicatrices y moratones, Fatna Ben Ghala buscó ayuda en un centro de asesoramiento para mujeres en un barrio pobre cerca de la capital marroquí, Rabat, después de que ella y su madre sufrieran violencia de un familiar.
Ben Ghala afirma que fue remitida al centro de asesoramiento de Araafa después de que fuera al hospital para buscar tratamiento para sus lesiones.
"Vivimos bajo la opresión y vivimos en el dolor. El golpe que recibí en mi cabeza afectó a mi visión", ha indicado Ben Ghala, quien no identificó al pariente que, según ella, la había agredido.
El centro de Araafa solo puede ayudar a una pequeña parte de las mujeres que dicen haber sido abusadas. En 2018 ofreció asesoramiento a 146 mujeres sometidas a todo tipo de violencia y abuso. Marruecos tiene decenas de centros de este tipo en todo el país.
"Tuve un aborto espontáneo debido a la paliza y las presiones mentales que estaba soportando", ha detallado Raja, una desempleada de 19 años, quien afirma que su esposo fue violento y que ahora vive con sus padres. "No puedo entender por qué ocurrió", ha aseverado.
Charifa, de 26 años, ha asegurado a Reuters que fue golpeada por su marido, quien la echó de casa y le impidió ver a sus hijos de 7 y 6 años.
"Ahora vivo con mi padre y no tengo forma de esta con mis hijos que ni siquiera están inscritos en el registro familiar y, por lo tanto, no pueden asistir a la escuela como otros niños", ha agregado.
Ben Ghala, Raja y Charifa tendrían que ofrecer más pruebas y llevar testigos a los tribunales para que los culpables sean enjuiciados. Sin embargo, es muy difícil llevar testigos en casos de violencia doméstica.
Marruecos adoptó una ley en septiembre de 2018 que penaliza la violencia doméstica y diversos tipos de acoso verbal "pero se necesita hacer mucho para reducir los requisitos de pruebas".
La ministra de Solidaridad, Familia y Desarrollo Social, Bassima Hakkaoui, señaló el domingo en un canal de televisión que la ley que penaliza la violencia contra las mujeres ha alentado a más a denunciar y demandar a sus agresores.
"Varias personas fueron acusadas en virtud de esta ley", indicó. Sin embargo recalcó que la tasa de violencia contra las mujeres es "aterradora" y añadió que cuestiona el papel de la educación y la ley.