NUEVA YORK, 12 Ago. (EUROPA PRESS) -
Al menos una persona ha sido detenida y otras ocho han resultado heridas por los enfrentamientos entre supremacistas blancos y contramanifestantes del movimiento de extrema izquierda "Antifa" antes de un mítin de extrema derecha, ahora cancelado por las autoridades del estado, que se encuentra en situación de emergencia.
"Hasta las 12.30 del mediodía se ha efectuado un único arresto y el personal de emergencia médica ha atendido a ocho heridos durante el evento", ha hecho saber la Policía de la ciudad en su cuenta de Facebook.
Esta declaración de emergencia ordenada por el gobernador del estado, el demócrata Terry McAuliffe, ha permitido la intervención de las fuerzas antidisturbios para dispersar a los manifestantes, que se han agredido con porras y espray de pimienta entre ellos.
Tras los choques, los supremacistas, acompañados de autoproclamadas "milicias" fuertemente armadas y que dicen, están ahí para impedir nuevos brotes de violencia, intentaron concentrarse en el parque Lee, donde las autoridades de la ciudad han previsto retirar la estatua en honor del general confederado Robert E. Lee.
La Policía de la ciudad se encargó de trazar un perímetro de seguridad en torno a los congregados, que han empezado a cantar "Jodéos, maricones" y "Combatamos contra la Sharia (ley islámica) ahora".
Los gritos han sido contestados por los Antifa con el eslógan "Matemos a todos los nazis", según ha constatado el enviado del medio estadonunidense 'The Huffington Post'.
Junto a la Policía también protegían a los concentrados varios intengrantes de las autoproclamadas milicias proconfederadas, que han sido respondidos por una cadena humana liderada por el reverendo y activista Cornel West.
REACCIONES
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha llamado a la unidad contra el "odio" exhibido en la protesta supremacista. "Tenemos que estar unidos y condenar todo lo que el odio representa. No hay lugar para esta clase de violencia en América. Unámonos", ha escrito el presidente en su cuenta de Twitter.
De igual modo se ha expresado su mujer y primera dama del país, Melania Trump, minutos antes y también en su cuenta oficial. "Nuestro país anima a la libertad de expresión, pero comuniquémonos sin odio en nuestros corazones. Nada bueno sale de la violencia", ha escrito.
El líder republicano de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, se ha mostrado más enérgico a la hora de condenar la manifestación de ultraderecha. "La ideología que alimenta el espectáculo de Charlottesville es repugnante. Espero que solo sirva para unir a los americanos contra esta clase de vil fascismo", ha escrito Ryan en su cuenta de Twitter.
Los integrantes del Partido Demócrata también han condenado la violencia y se han referido específicamente al supremacismo blanco como responsable de la misma. "Tenemos que proteger la libre expresión, pero también condenar el odio, la violencia y el supremacismo blanco", ha denunciado el expresidente de EEUU, Bill Clinton.
ENFRENTAMIENTOS NOCTURNOS
Cientos de supremacistas blancos, algunos al ritmo de soflamas nazis, habían marchado esta pasada noche con antorchas por las calles en el preludio del encuentro de este sábado, que iba contar con la presencia de figuras de la nueva extrema derecha norteamericana, como Richard Spencer.
Durante la marcha de la pasada noche, algunos de los asistentes han gritado la consigna nazi "Sangre y Tierra", el lema del antiguo Ministerio de Agricultura del Tercer Reich que exaltaba los valores del campesino alemán frente a su gran enemigo, el "prestamista judío".
Siguiendo esta línea antisemita y xenófoba, otros de los asistentes han marchado al grito de "los judíos no nos reemplazarán" o "Un pueblo, una nación, terminemos con la inmigración" antes de llegar a la rotonda principal de la universidad de Virginia, rematada por una estatua del ex presidente estadounidense Thomas Jefferson, donde se encontraban concentrados un pequeño grupo de contramanifestantes con la pancarta "Estudiantes de Virginia contra el supremacismo blanco".
La concentración rodeó a los estudiantes, a los que arrojaron antorchas y propinaron patadas, según ha constatado en un comunicado la presidenta de la Universidad, Teresa Sullivan, quien además ha denunciado que los manifestantes también agredieron a personal de la Universidad.
"Estoy profundamente entristecida y perturbada por el odioso comportamiento desplegado esta pasada noche en nuestro recinto por estos manifestantes. Condeno enérgicamente el asalto que han perpetrado, sin mediar provocación alguna, contra miembros de nuestra comunidad que intentaban mantener el orden", ha lamentado.
Varias personas han sido atendidas por heridas leves al resultar rociadas con espray de pimienta, de procedencia desconocida, y al menos una persona no identificada ha sido arrestada, de acuerdo con el medio local 'Daily Progress'.
"Ha sido un cobarde desfile de odio, fascismo, racismo, racismo e intolerancia", hizo saber el alcalde de Charlottesville, Mike Signer. "Estoy mucho más que asqueado por este despreciable y prohibido despliegue de intimidación en un terreno universitario", ha hecho saber a través de un post de Facebook.