BAGDAD, 10 Ene. (DPA/EP) -
Un policía ha muerto y 45 manifestantes han resultado heridos este domingo en nuevos enfrentamientos en Nasiriya, en el sur de Irak, escenario habitual de protestas contra el Gobierno central de Bagdad.
Los enfrentamientos estallaron después de que los manifestantes iraquíes se reunieran en la plaza de Al Habobi para exigir la liberación de varios manifestantes que habían sido detenidos durante una protesta previa para pedir, como otras tantas, mejores servicios en la ciudad y empleos para sus residentes.
Decenas de manifestantes han quemado neumáticos a modo de barricada en la calle principal de la ciudad, según testigos presenciales. Las fuerzas de seguridad habían desplegado un importante dispositivo, principalmente en la plaza Al Habobi, epicentro de las protestas.
El gabinete de prensa del Ejército ha informado de un policía muerto y 33 agentes más heridos por la violencia, según ha recogido la agencia de noticias oficial iraquí, INA.
Las manifestaciones han sacudido a Irak desde octubre de 2019, y los manifestantes pidieron una revisión del sistema político del país, que ha estado vigente desde la invasión liderada por Estados Unidos en 2003.
Las protestas, caracterizadas también por la violentísima represión de las fuerzas de seguridad, llevaron al entonces primer ministro Adel Abdel Mahdi a renunciar a finales de noviembre de 2019.
El Gobierno actual, encabezado por Mostafá al Kazemi, está lidiando con una profunda crisis económica agravada por la caída de los precios del petróleo, la principal fuente de ingresos de Irak, así como por la pandemia.
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