Palestios en los restos de un incendio provocado por un bombardeo israelí contra un campamento de desplazados en Rafá, en el sur de la Franja de Gaza - Europa Press/Contacto/Hashem Zimmo
El Consejo de Seguridad de la ONU convoca una reunión de emergencia a puerta cerrada tras los últimos ataques contra Rafá
MSF acusa a Israel de mostrar un "total desprecio por las vidas civiles"
MADRID, 28 (EUROPA PRESS)
Al menos siete palestinos han muerto y varios han resultado heridos este martes tras nuevos bombardeos del Ejército de Israel contra el campo de desplazados del barrio de Tal al Sultán, situado en la ciudad de Rafá, en el sur de la Franja de Gaza, tan solo un día después de que las fuerzas israelíes matasen al menos a 45 personas en un ataque similar contra el campamento de desplazados de Barakasat, en la misma zona.
La mayoría de las víctimas mortales pertenecían a una misma familia y fallecieron al ser alcanzadas por un proyectil que cayó sobre su tienda de campaña en el campo de desplazados, situado en el oeste de Rafá, según informaciones de la agencia palestina de noticias WAFA, que apuntan a que el campamento se encuentra situado en las inmediaciones de una sede de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA).
Posteriormente, al menos un palestino ha muerto en otro ataque perpetrado contra el Hospital Indonesio, en la misma ciudad. Mientras, en el centro de la Franja de Gaza se han registrado bombardeos, que también se han saldado con varias víctimas mortales.
La ONG Médicos Sin Fronteras (MSF) ha señalado que los ataques han tenido lugar de forma "incesante" a lo largo de la noche y se han registrado "peligrosamente cerca de un centro de estabilización de trauma" de la organización en Tal al Sultán. "No se ha permitido salir a los trabajadores que deberían hacer terminado sus turnos, mientras que los que tendrían que haber empezado a trabajar esta mañana han tenido que desistir de hacerlo a causa de los combates", ha lamentado Martina Marchiò, coordinadora médica de MSF en Gaza.
"Desde Médicos Sin Fronteras condenamos una vez más, de forma enérgica, estos ataques y esta violencia y pedimos una vez más un alto el fuego inmediato para poder seguir prestando asistencia a la población", ha aseverado, según un comunicado de la ONG.
Paulo Milanesio, coordinador de emergencias de MSF en Gaza, ha asegurado que cada vez llega más gente a Al Mawasi, donde se encuentra otro de los equipos de MSF. "Más y más gente está desplazándose procedente del oeste de Rafá. Sin ningún tipo de orden de evacuación, las fuerzas de Israel están entrando en el oeste de Rafá y siguen atacando. Hemos pasado otra noche de ataques indiscriminados", ha puntualizado.
"Denunciamos lo que sigue sucediendo después de que la Corte Internacional de Justicia haya solicitado a Israel que detenga la ofensiva. Esta situación no hace más que demostrar que los civiles de Gaza están siendo objetivo en esta guerra, que no existe ningún lugar seguro en la Franja y que necesitamos detener esa situación. Por eso, pedimos un alto al fuego duradero y que permita parar esta desgracia", ha sostenido.
MSF ha acusado a Israel de mostrar un "total desprecio por las vidas civiles" y ha señalado que la mayoría de los pacientes atendidos presentaban heridas de metralla, fracturas, traumatismos y quemaduras. "Aunque las fuerzas israelíes describieron este ataque como preciso, el número de víctimas demuestra lo contrario", ha indicado.
"Entre las personas trasladadas al punto de estabilización había mujeres, niñas y niños. Una vez más, la población civil está pagando el precio de esta guerra. Este ataque israelí contra un campo de desplazados, en una supuesta zona segura en Rafá, muestra el total desprecio por las vidas de los civiles en Gaza", ha afirmado Samuel Johann, coordinador de emergencias de MSF en Gaza.
El ataque perpetrado el lunes contra el campamento de Barakasat ha despertado una oleada de críticas y condenas a nivel internacional y ha llevado al Consejo de Seguridad de la ONU a convocar para este mismo martes una reunión de emergencia a petición de Argelia para abordar la situación.
El Ejército de Israel confirmó entonces el bombardeo y señaló que logró neutralizar a dos altos cargos de Hamás, si bien reconoció que "como consecuencia del ataque y un incendio desatado a posteriori en la zona varias personas resultaron heridas". Así, ha afirmado que se está "revisando" el incidente.
Israel comenzó una ofensiva contra la Franja de Gaza a raíz de los ataques de Hamás, que se saldaron con 1.200 muertos y 240 rehenes. Desde entonces, las autoridades gazatíes han notificado la muerte de más de 36.000 palestinos, a los que se suman más de 510 en Cisjordania y en Jerusalén Este como consecuencia de las acciones de las fuerzas de seguridad y los ataques de colonos israelíes.